Un camión vuelca en la rotonda de Monelos y obliga a cortar el tráfico

Pasadas las cuatro de la tarde, un camión cargado con broza sufrió un vuelco en la rotonda superior de Monelos. El conductor perdió el control de su vehículo cuando enfilaba la ronda de Camilo José Cela y acabó volcando sobre su costado derecho. Afortunadamente, el conductor, que llevaba el cinturón de seguridad, resultó ileso, y pudo salir de la cabina volcada por sus propios medios. Según él, la causa del accidente fue el peraltado de la rotonda. Una opinión que coincide con la de algunos vecinos, que fueron testigos del suceso.

“En esta rotonda (la que se encuentra en el cruce de la avenida de Monelos con la ronda de Camilo José Cela) ya se han producido varias salidas de vía hace poco”, comentaba un vecino. En algún caso, como el que ocurrió hace unas semanas, un coche estuvo a punto de precipitarse por un terraplén de los que rodean las viviendas del barrio de Las Flores, aseguran. Sin embargo, el vuelco de ayer no fue tan grave.

El camión viajaba lentamente, procedente del punto limpio de Eirís, donde había recogido su carga, consistente en dos toneladas y media de ramas y tierras, aproximadamente. Su destino era la planta de reciclaje de Nostián. Había bajado por la avenida de Monelos y entró en la rotonda. “La cogí sin ningún problema –asegura el conductor–pero fue cuando me salí de ella cuando noté que la caja de atrás se me iba”. El camión volcó justo al llegar a la calle de los Lirios, sobre la propia calzada, pero la carga cayó sobre la acera. Afortunadamente, ningún peatón resultó herido.

Con una grúa

Al lugar de los hechos acudieron efectivos de emergencias sanitarias del 061, así como Policía Local y Bomberos. La primera medida fue cortar al  tráfico ese acceso de la ronda de Camilo José Cela, y se llamó a una grúa de gran tamaño para retirar el vehículo dañado, lo que no se consiguió hasta pasadas las cinco de la tarde. Poco antes se liberó un carril para permitir el paso del tráfico en dirección a Matogrande.

Mientras tanto, los agentes de la Unidad de Atestados de la Policía Local recogieron pruebas del lugar de los hechos. Aunque los resultados tardarán semanas en realizarse, los primeros indicios apuntan a que el conductor viajaba por debajo del límite de velocidad, que en esa zona es de 50 kilómetros por hora.

Fuentes de la Policía Local consultadas reconocen que el peraltado de esa zona efectivamente, tiene un derrame hacia la calle de los Lirios, lo que favorece que los vehículos se salgan de la vía si circulan con exceso de velocidad, o como en el caso de ayer, cuando se trata de vehículos pesados por la inercia de su carga.