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martes | 14 mayo | 2024
p. g. l. > a coruña
La representación de la obra Corporal (je taime), el pasado mes de mayo, fue la última actividad que acogió el teatro del Ágora, un proyecto millonario 20 millones según los populares, 13 de acuerdo con las cuentas socialistas pensado para convertirse en el Fórum Metropolitano del siglo XXI. Desde entonces, unas vallas impiden el acceso a un recinto cerrado, y que nunca llegó a abrir sus puertas definitivamente. Ahora, los socialistas reclaman que se pongan en marcha una infraestructura que, tal y como apuntó ayer la portavoz municipal del PSOE, Mar Barcón, permitiría la creación de cien puestos de trabajo, tanto directos como indirectos.
Mantener cerrado el Ágora supone el mayor atentado a las políticas sociales de la ciudad, denunció la socialista, que considera que esta decisión responde a un capricho del Ayuntamiento. Se hace conscientemente y, además, presumiendo de ello y cuestionándose si era necesaria una inversión como esa, manifestó la concejala del PSOE. Para la exparlamentaria, el único motivo por el que el PP no quiere dar luz verde al nuevo centro cívico es consecuencia de una falta de vocación y de comprensión del proyecto.
Barcón recordó que la infraestructura ideada por los socialistas durante su etapa al frente de María Pita fue diseñada para dar servicio y mejorar la calidad de vida de los 55.000 vecinos de O Ventorrillo, San Pedro de Visma, Os Mariñeiros y Agra do Orzán. La Coruña humilde según Barcón, que considera que los residentes de estos barrios llevaban mucho tiempo esperando por una dotación cívica de envergadura. No todo lo bueno tiene porque estar en el centro, recalcó, y puso como ejemplo la transformación sufrida por otras zonas como Monte Alto tras la apertura de la Domus.
Según Barcón, los socialistas dejaron el centro en condiciones para empezar a funcionar. Asegura que había una programación y que, incluso, se habían adjudicado algunos concursos para el mantenimiento de las instalaciones. Además, dice, había dinero.
Un engaño > Para el Ayuntamiento, con sus declaraciones de ayer por la mañana sobre el Ágora, la portavoz del PSOE solo busca manipular y engañar a los vecinos al asegurar que su partido dejó lista la instalación. Califican de tomadura de pelo que traten de dar ahora ejemplo en un proyecto en el que solo tuvieron prisas para su inauguración justo antes de las elecciones, pese a que, según sostienen, no estaba finalizado.
Además, para el gobierno municipal, el Ágora se ha convertido en uno de los mayores despropósitos en la ejecución de obra pública que se recuerda en la historia de esta administración, y también, en uno de los mejores ejemplos del despilfarro socialista de los últimos 28 años, ya que de los 8,28 millones de euros en los que estaba presupuestado inicialmente, la obra acabó costando al final 20 millones de euros.
Todo esto hace que, desde su punto de vista, el proyecto acabe siendo recordado como un escándalo, por los continuos incrementos en el coste de su construcción, y también de su equipamiento, en el que se despilfarraron 1,4 millones en la adquisición de muebles.
