Aumenta el número de coruñesas infectadas por el virus VIH

Aumenta el número de coruñesas infectadas 
por el virus VIH
El Comité Antisida da Coruña (Casco) celebró su 25 años con una exposición en el Fórum patricia g. fraga

El área sanitaria de A Coruña registró este año entre 60 y 65 nuevos positivos del virus VIH, una media que se mantiene en el tiempo, si bien llama la atención un pequeño repunte por parte de las mujeres infectadas.
El médico adjunto del Servicio de Medicina Interna del Chuac, Álvaro Mena, explica que de los cinco o siete positivos femeninos se ha pasado a 15 en 2016. Esto puede deberse al aumento de las relaciones bisexuales, “algo que hay que tener en cuenta de cara a la prevención” porque la mayoría de los casos corresponden a homosexuales, pero esta práctica doble le salpica también a ellas.
Por otra parte, la mayoría de los nuevos afectados se contagiaron en relaciones sexuales y no como hace 15 o 20 años, “cuando predominaba la transmisión por materiales inyectables que compartían los que consumían drogas”. Además, se da la circunstancia de que se detectan infecciones en jóvenes de 18 a 20 años, aunque la media se sitúa en 35 años: “Siempre sube porque hay personas entre el conjunto de 50 y pico”.
De cara a la prevención, los aspectos terapéuticos han cambiado. Mena calcula que en año y medio o dos años, las pastillas serán sustituidas por inyecciones que “se pondrán cada dos o cuatro meses en el hospital”.
En la actualidad, el nuevo tratamiento está fase de ensayo clínico. Es similar al que se suministra por vía oral, por lo tanto “no es una vacuna ni una medicación erradicadora”. Eso vendrá más adelante, asegura el doctor. Mientras, tanto los que copan el mercado como los que se administrarán con jeringuillas apenas tienen efectos adversos y el paciente “puede llevar una vida plena y normal”. Esta mejora tiene la contraindicación de que los coruñeses se han relajado al respecto: “Se quitan los estigmas, ven que los infectados están bien y que no se está expuesto a la enfermedad como en los 90, que el contagio suponía el fallecimiento”. Ahora lo contemplan como un mal crónico, “para lo que tomas una pastilla” y “la magnitud del problema se relativiza”.
Para el experto, es muy importante tratar a todos, los que tienen el VIH y los enfermos de Sida porque más allá de que “se deteriora la inmunidad”, los pros prevalecen sobre los contras: “Los medicamentos ya no tienen toxicidad y son duraderos”.
Los costes, en cambio, le siguen suponiendo al bolsillo un desembolso importante, “pero el beneficio está muy por encima”. Es vida. Mena apunta que el afectado puede gastarse al año 7.000 euros en el tratamiento. El doctor recomienda a todos los coruñeses que han tenido una práctica de riesgo realizar la prueba: “Te la pueden hacer en el centro de salud con una muestra de sangre o también con tests rápidos que es como una piruleta que empapas de saliva”. Esta última se puede comprar en las farmacias y el veredicto es instantáneo “como uno de embarazo”. Según el responsable de la unidad de VIH son fiables, pero en caso de que dé positivo, aconseja acudir al hospital porque “los infectados no se les escapan, pero pueden ser falsos positivos” y conviene confirmarlo.
La presencia de jóvenes en la estadística les lleva a intensificar las campañas preventivas en colegios y colectivos juveniles. El preservativo sigue siendo el mejor de los amigos que evita al 100% los contagios si se usa de manera adecuada durante toda la penetración: “Es básico que no se piense que con ciertas personas no es necesario, con todas hay que tomar medidas”. Y es que entre el 25 y el 30% de los infectados no lo saben y el tratamiento ya no solo es bueno para que la inmunidad se prolongue, sino también porque “los pacientes tratados tienen un riesgo de transmisión prácticamente nulo”. De esta forma, si se diagnosticara a los ocultos y todos recibieran medicación, “no habría transmisores”.
De las otras enfermedades que se pueden adquirir por vía sexual, Mena destaca un repunte de la sífilis, “que tiene curación, pero nos preocupa un poco”.
El papiloma, aunque en la mujer está bastante controlado a través de citologías periódicas, en los hombres homosexuales es preocupante porque no se hacen pruebas y aún tienen mayor incidencia los que tienen el VIH.
La ampliación de la vacuna a varones es una de las luchas. Todavía no está aprobada en España, pero sí en Estados Unidos o Australia, con “resultados muy buenos”. Hay que tener en cuenta que este virus es capaz de desarrollar no solo el cáncer de cervix, también el anal y el de faringe, por lo que aumentar el baremo de posibles es importantísimo.

Aumenta el número de coruñesas infectadas por el virus VIH

Te puede interesar