Algunos indignados aseguran que no dejarán el campamento del Obelisco

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  redacción>a Coruña

  Los integrantes de la acampada  de indignados del Obelisco están divididos. Mientras que el pasado domingo se avanzaba a través de internet que el campamento se desmantelaría a lo largo de la tarde de hoy, algunos de sus miembros no están dispuesto a levantar las tiendas de campaña y abandonar el lugar de forma definitiva.
Al parecer, la decisión de terminar con una concentración que está a punto de superar los tres meses de vida surgió de quienes comenzaron con esta reivindicación el pasado 17 de mayo. Los impulsores del movimiento 15-M en A Coruña han decidido finiquitar su estancia en el centro de la ciudad, pese a que muchos otros indignados se hayan ido sumando a esta concentración a lo largo de este tiempo. Son precisamente algunos de estos integrantes los que se niegan a abandonar el Obelisco, pese a la decisión alcanzada en la última asamblea interna celebrada por el colectivo.  
Los detractores afirman que esta decisión la tomó gente externa al campamento y que, pese a formar parte del movimiento, no  viven a diario en la acampada. A las 16.00 horas de hoy está previsto que comiencen los trabajos de desmantelamiento.

Críticas > Pese a que el movimiento 15-M surgió con mucha fuerza en la ciudad, esta se ha ido debilitando a medida que pasaba el tiempo. De hecho, aunque la acampada ha ido creciendo poco a poco en dimensión, lo cierto es que cada vez se contaban menos personas viviendo en alla a diario. También las asambleas dejaron de ser tan multitudinarias como las primeras celebradas en el mes de mayo y junio, así como las grandes manifestaciones y cadenas humanas, que lograron sumar a más de 1.000 coruñeses a las protestas de estos indignados con el sistema actual.
A medida que el campamento se debilitaba, las críticas en su contra comenzaron a surgir. Muchos coruñeses aplaudieron la decisión comunicada el pasado domingo de terminar con una acampada que, en opinión de muchos internautas, ha perdido su razón de ser y se ha convertido en una congregación de indigentes en la ciudad. Los comentarios en las redes sociales, que han sido uno de los filones más importantes de los que se ha nutrido este movimiento, hablaban durante los últimos días de que “la acampada solo aporta basura a las calles de la ciudad”.
Quienes frecuentan con asiduidad la zona de los Cantones llevan semanas criticando que en el campamento no quedaba ninguno de los “idealistas” que impulsaron el espíritu del 15-M en A Coruña y que la acampada había degenerado en un cúmulo de “basura”.

Seguirán desde fuera > A través del perfil de Twitter @acampadacoruna se comunicó a todos los seguidores la decisión de levantar definitivamente el campamento, aunque también se aseguraba que esta decisión no supondría el cese de la actividad de este movimiento. El primero de los mensajes, publicado el pasado domingo, decía: “Martes 16 de agosto a las 16:00 se levanta #acampadacoruna. Seguimos con el trabajo fuera del Obelisco pero seguirá siendo punto de encuentro”.
Las felicitaciones por esta decisión por parte de los seguidores de la cuenta no se hicieron esperar, al tiempo que se demandaban a los integrantes del movimiento crítico “respuestas concretas” para seguir contando con el apoyo de los afines.


 

Algunos indignados aseguran que no dejarán el campamento del Obelisco

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