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sábado | 20 abril | 2024
La tensión no deja de crecer en el proceso de la venta de Alcoa. El comité de empresa de Avilés se desmarcó esta semana de la oferta de la suiza Parter Capital, que compraría ambas plantas, la de A Coruña y la de Avilés, y apoya la de la alemana Quantum, a la que solo le interesa la planta asturiana. Por su parte, los coruñeses creen que aún quedan cabos que atar y quieren prolongar las negociaciones. Pero ni el Gobierno ni Alcoa están dispuestos a dar marcha atrás y la multinacional americana entregó el texto del acta de finalización de las negociaciones ayer junto con un ultimátum: les da de plazo hasta el domingo para aprobarlas.
En la reunión celebrada el miércoles en Madrid y que se prolongó hasta altas horas de la noche, la multinacional informó a los trabajadores de que había cerrado un principio de acuerdo para vender las dos plantas a los suizos el día 31 y que el principio de acuerdo estaba aprobado por la empresa matriz de la compañía, en Pittsburgh. En el acta final se amplia el plazo del acuerdo para la venta de las plantas al 31 de julio y da por finalizado el acuerdo del ERE una vez se haya consumado la transacción.
El documento de Alcoa incluye cuatro cláusulas. Hace referencia a que las partes reconocen que la empresa ha seguido el proceso de venta de ambas plantas según lo acordado (un punto en el que los sindicatos tienen sus reservas), que se pospone hasta el 1 de agosto la ejecución del despido colectivo, que el apoyo financiero de Parter es una condición suspensiva y que antes del 7 de julio se tiene que suscribir el contrato de compraventa. Además, el texto recoge que el próximo 1 de agosto se informará del proceso de venta al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
El documento señala que si el 31 de julio el fondo suizo Parter, al que se le han exigido más garantías de liquidez para formalizar la compraventa de ambas plantas, cuenta con el apoyo financiero exigido, no se procederá al ERE, mientras que en el caso contrario el despido se ejecutará a partir del 1 de agosto.
Un texto “asumible”
Los comités de empresa nunca han querido aprobar ningún acuerdo porque, como señalan, ellos nunca participaron en las negociaciones entre Alcoa y Parter Capital y consideran que es una forma de atarles las manos en el futuro, pero tras la reunión de ayer, en la que no se consiguieron más avances, fue cuando Alcoa decidió plantear el ultimátum. Desde el Ministerio de Trabajo se ha trasladado que el texto es asumible para los sindicatos ya que no introduce obligaciones distintas a las que se acordaron el 15 de enero.
Fuentes de Alcoa indican que las dificultades para la ratificación responden a que todo el mundo quiere salvaguardar su posición y consideran que la ratificación es importante para todos. Parter Capital se compromete a mantener el 100% de la plantilla (compuesta por 700 trabajadores) durante un mínimo de dos años.
