“Ahora a la gente ya no le aterra tener que enfrentarse al Sergas”

La manera de ver las cosas que los pacientes tienen actualmente no tiene nada que ver con la de hace unos años, como explica Beatriz Barros. Ese “miedo” que tenían a protestar, reclamar o denunciar al Sergas se ha perdido y eso es gracias a que la gente tiene un nivel mayor de información, gracias, por ejemplo, a esta asociación.

¿Cómo nació esta entidad?
Eran varias personas las que se juntaron tras haber tenido problemas, ellos o sus familias, con intervenciones médicas. Querían ver qué posibilidades tenían para actuar contra el Sergas, porque individualmente era David contra Goliat.

¿Y no da la sensación de que el servicio público de salud vuelve a parecer intocable a pesar de esa mayor información del paciente? Lo digo por el descenso en las indemnizaciones, los procesos tan largos y enrevesados...
La mentalidad ha cambiado. Como decía antes, ya nadie se cree lo de la mala suerte. Quieren saber si no fue por otra cosa y ya no les aterra enfrentarse al Sergas. Pero sí es verdad que es un proceso tan largo, con tanto sufrimiento, y a eso hay que añadirle ahora lo de las tasas judiciales...

¿No se desaniman al ver que esos procesos duran tanto e incluso cuando desde el principio les advierten de que se puede prolongar varios años?
No, para nada. No, porque viene fresca la cosa. Si lo inicias pasado un año, cuando la situación ya no es la misma, seguro que el porcentaje de reclamaciones bajaría, pero estando reciente cuando se inicia el proceso, ya va hasta el final.

¿Reciben más quejas de la sanidad pública o de la privada?
Más de la pública, pero porque hay más gente que es usuaria de esta que de la privada.

¿Los procedimientos a seguir son los mismos?
No, son diferentes. Y el mecanismo, también. Cuando es contra el Sergas, se trata de un proceso contencioso administrativo, mientras que contra una compañía privada es civil, nada que ver. A día de hoy, no creo que haya diferencias a la hora de indemnizar, pero es cierto que las de la privada son compensaciones más altas. No sé por qué, ya que el daño es exactamente el mismo.

Y en el caso de que el cliente que contrata vuestros servicios jurídicos quiera la inhabilitación del profesional médico que le trató, ¿cómo se actúa?
Cuando es la sanidad pública, la reclamación va contra el Sergas y ellos llaman a su compañía aseguradora. No se presenta contra un médico en concreto. Pero en el caso de la privada sí se consiguen inhabilitaciones. De todos modos, los procedimientos penales los contamos con una mano.

“Ahora a la gente ya no le aterra tener que enfrentarse al Sergas”

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