“En la actualidad el pop y el rock han pasado a un nivel underground”

Si la mitad de la naranja de Duncan Dhu, Diego Vasallo, tuviera que pintar a su banda no sabría cómo hacerlo. Demasiados cambios, demasiados años...

¿Por qué regresa ahora Duncan Dhu?
Son una serie de razones y circunstancias que se han dado para que volvamos ahora y no antes. La principal es que Mikel y yo desde hacía tiempo estábamos acercándonos a nivel musical. Teníamos más contacto creativo que años atrás y después vino la propuesta detonante de Warner México de hacer un recopilatorio con canciones nuevas. Lo cierto es que nos sentimos muy bien y seguimos para adelante con ganas.

¿Cómo son los seis nuevos temas incluidos en el EP “El duelo”?
En cierta manera responden a las influencias que teníamos hace muchos años cuando empezamos más toda la experiencia que nos da el tiempo y la madurez musical. Creo que hay una conexión con todo lo que nos movió para tocar, con el rock, country y rockabilly, que están en los primeros discos.

Unas influencias que fueron aparcando con el tiempo...
Duncan Dhu tiene una trayectoria bastante larga y con los años hemos ido cambiando mucho, pero sí es cierto que las primeras influencias se fueron diluyendo y aparecieron otros caminos que tienen que ver con el pop.

Su carrera en solitario sí que no tiene nada que ver con Duncan Dhu, ¿qué le aporta una y otra música?
Es verdad, porque siempre quise que se distinguieran lo más posible. En solitario doy rienda suelta a otras inquietudes y caminos, son músicas cercanas a otros folclores, donde les doy mayor peso a las letras y a la voz. Duncan Dhu para mí ha sido fundamental en toda mi trayectoria y en mi vida. Le he dedicado más de 20 años a la banda y fue algo muy intenso y excitante al principio, el hecho de crear la banda y después hacer en solitario otras cosas me ha dejado bastante satisfecho a nivel creativo. Esto se ha movido por circuitos minoritarios y en definitiva son dos caras de Diego Vasallo de una misma moneda.

¿Ya no pueden estar separados Mikel y usted?
Tanto como eso, creo que no. No lo sé. Además, no quiero hacer planes de futuro. Estamos inmersos en esta gira con el mini LP y queremos disfrutarla y vivirla a fondo.

¿Cómo está siendo el reencuentro con el público?
Muy positivo. La experiencia está siendo quizás mejor que nunca porque estar catorce años sin tocar favorece. La gente viene predispuesta y con ganas y por nuestra parte pasa lo mismo. Cuando sales, lo vives de una manera intensa.

Entre su público habrá gente de todas las edades en sus conciertos, ¿no?
Sí, hay de todo. El otro día había alguna madre con niños pequeños, pero en general está el público de nuestra quinta, la gente que lo vivió.

Tras casi treinta años en la pomada, ¿cómo ve la música en España?
A ciertos niveles, hay una evolución desastrosa, sobre todo, en cuanto a industria y medios de comunicación. Hace veinte años, la música pop y rock tenía más presencia en radio y televisión, pero en la actualidad han pasado a un nivel underground. Por otro lado, hay gente muy válida y con nuevas ideas. Creo que ahora es más complicado sobrevivir que hace veinte años.

Tocando su otra faceta, la pictórica, si tuviera que pintar a Duncan Dhu, ¿cómo lo retrataría?
Sería difícil porque me muevo entre la abstracción. No sé lo que haría porque Duncan Dhu ha cambiado tanto... No tiene nada que ver unas épocas con otras.

De todo este tiempo con Duncan Dhu, ¿qué momentos tiene grabados?
Con cariño recuerdo los primerísimos tiempos, el primer concierto en un bar de Donostia, la primera vez que tocamos en el Zeleste de Barcelona, una sala que ya no existe. Todo eso lo guardo con especial cariño. También están los momentos anecdóticos de cuando fuimos a la ceremonia de los Grammy y vimos a Dylan en directo. Hay muchos y también malos.