Abre un tramo de La Marina, mientras siguen las acusaciones sobre su licencia

Los coruñeses se sorprendieron ayer al ver abierto un tramo de La Marina de unos 100 metros de la calle Fama, mientras conitúa la polémica ente el Ayuntamiento y la Autoridad Portuaria por la validez de la licencia de las obras. Lo que sí continúa cerrado es la zona infantil, sin que haya fecha prevista para su inauguración y apertura cuando ya se acumulan tres meses desde la fecha prevista.
El 9 de marzo el presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, fijó para el 30 de abril la finalización de las obras de La Marina. “Todo hace pensar que tanto la urbanización como el túnel estarán listas para entonces”, apuntó Losada. Transcurridos tres meses, unas elecciones municipales y varios problemas técnicos, la situación ha cambiado radicalmente. El nuevo gobierno local creía que, con suerte, La Marina podría estar lista para octubre, lo que hubiera significado un retraso total de seis meses, pero el permanente desencuentro que mantiene con la Autoridad Portuaria, a la que exige que presente la autorización de los trabajos, podría hace recaer la tarea de determinar las actuaciones y los plazos en la Xunta.   
En realidad, la mayor parte del trabajo está hecho, casi en un 99%. En marzo, el entonces alcalde, Carlos Negreira, inauguraba el 40% de la nueva urbanización de La Marina y declaraba que esperaba que el resto se abriera “en unas semanas”. Pero es ese espacio, unos 18.000 metros cuadrados, lo que permanece vallado ahora y el Puerto se niega a retirar las barreras a menos que el Ayuntamiento recepcione las obras y el gobierno local ya ha dicho que no lo hará.
No es la primera vez que el concejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, advierte al organismo portuario que no piensa recepcionar una obra suya. Ya ocurrió algo parecido con el túnel de O Parrote, que el edil inspeccionó personalmente para descubrir que se estaba filtrando agua de mar, lo que atribuyó a la precipitación con la que se trabajaba. Se reunió el 6 de julio con los representantes de la Autoridad Portuaria y exigió que se solucionaran los fallos, dado que, una vez recepcionado, el mantenimiento de la obra pasaría a ser responsabilidad del gobierno local. La Autoridad Portuaria negó entonces deficiencias en el túnel y replicó que si había filtraciones, era porque todavía estaba en construcción. El Ayuntamiento asegura que las obras se siguen haciendo de manera más “calmada”. Fue también Varela el que dio a conocer en julio la existencia de un lecho de roca entre O Portiño y que La Marina que retrasaría las obras y obligará a realizar microvoladuras. 

trámites
Pero la roca ha resultado ser un obstáculo menos duro que la ley. Varela asegura que la obra está fuera de ella a menos que se presente una autorización, pero la Autoridad Portuaria y el PP lo niegan: según ellos, la urbanización de La Marina cumple con todos los trámites técnicos y administrativos y cuenta con todas las autorizaciones precisas.
Recuerdan que la mayor parte de la urbanización se realiza en terrenos que ya son de la Autoridad Portuaria y respecto a los terrenos municipales, el ayuntamiento es copromotor de la obra a raíz del convenio firmado en 2012 por lo que no procede darse licencia a sí mismo y en cuya adenda II, de marzo de 2014, se autoriza al Puerto a la ejecución de las obras.