El delegado de la Xunta en A Corula, Gonzalo Trenor, comenzó la semana visitando el laboratorio LP10 Lab de productos cosméticos, uno de los establecimientos beneficiados por la orden de ayudas dirigidas a impulsar la estrategia digital y la modernización del sector comercial y artesano en Galicia. En concreto, se concedieron más de 540.000 euros a un total de 66 comerciantes y talleres artesanales coruñeses que movilizarán 681.000 euros.
Las comarcas de A Coruña y Betanzos cuentan con cuarenta y dos beneficiarios, distribuidos de la siguiente manera: Cambre con diez, Oleiros con cinco, Betanzos con tres y, con uno cada uo de ellos, Arteixo, Bergondo, Carral, Miño, Curtis y Paderne.
Los apoyos están dirigidos a acciones como la implantación y actualización de páginas web
Estas ayudas de la Vicepresidencia Segunda y Consellería de Economía, Empresa e Innovación cuentan con dos líneas: una destinada a la digitalización comercial que contempla actuaciones entre las que destacan la implantación de un gestor de redes sociales, la creación de web con venta online, la realización de publicidad en medios digitales, así como la mejora de la imagen digital. Asimismo, se concedieron apoyos para marketing 4.0, logística digital o participación en ferias digitales.
La segunda línea, está destinada a la adquisición de equipamientos propias de la actividad comercial y artesanal que desarrollan, como maquinaria y herramientas que mejoren el diseño y calidad del producto final.
Estas ayudas se enmarcan en las medidas que la Xunta está adoptando con el objetivo de que el sector comercial pueda adaptarse a los nuevos hábitos de consumo, como el comercio electrónico, así como la otros canales de comercialización, como las redes sociales, lo que se traduce en una mayor competitividad del sector y un aumento de sus ventas.
Con estas medidas se persigue que el sector comercial pueda adaptarse a los nuevos hábitos de consumo
De esta manera, desde la institución autonómica también se potencia la presencia del comercio gallego de proximidad en las redes sociales, impulsando su conexión con el cliente y creando nuevas redes de fidelización e imagen de marca, buscando adaptar estas empresas a las nuevas tendencias del mercado.
Entre los retos para el sector está el establecimiento de un nuevo modelo de comercio inteligente que sitúe al cliente en el centro de su estrategia, aprovechando todos los recursos que existen a su disposición.