Reportaje | Betanzos ‘acumula’ cuarenta años de suposiciones, sin rastro del Misterio de La Anunciación

Reportaje | Betanzos ‘acumula’ cuarenta años de suposiciones, sin rastro del Misterio de La Anunciación
Exterior de la iglesia de Santa María do Azougue, que en 1981 registró el robo de las tallas del altar mayor | AEC

Leopoldo Calvo Sotelo visitó Betanzos en 1981. Cuatro días después del asalto a Santa María do Azougue. Un suceso que conmocionó la ciudad y se saldó con el expolio de catorce tallas del siglo XV que los especialistas de la época valoraron en 500 millones de las antiguas pesetas y del que, tras su detención en 1983, reconoció ser autor el célebre Erik ‘El Belga’. Ningún presidente del Gobierno de España volvió a Betanzos. Sí trece de las tallas, pero nunca se pudo encontrar la del Misterio de La Anunciación.


En 2023 se cumplirán cuarenta años de la recepción de las últimas piezas recuperadas del Altar Mayor de O Azougue. Cuatro decenios desde que el 19 de febrero de 1981 se entregaron trece piezas halladas semanas antes en el extranjero y depositadas en la Embajada de España en París, y desde que, en noviembre, se realizó un envío definitivo desde Barcelona. No hubo más, a pesar de los intentos por localizar La Anunciación en Londres y París.


Con todo, la ciudad, que se había organizado en comisión para ‘rescatar’ todos los elementos expoliados y que el día 6 de febrero de 1982 había celebrado una primera recepción presidida por el entonces arzobispo Suquía, organizó un acto de ‘reinauguración’ en la Nochebuena de 1985.


En el sitio de La Anunciación se colocó la que representa a San Joaquín y Santa Ana, que los asaltantes no pudieron llevarse porque en la noche del expolio estaba en la sacristía de O Azougue.


Un conocido semanario londinense llegó a publicar una nota en la que aseguraba que, en una tienda de antigüedades de la capital dedicada a la compra-venta de este tipo de obras de arte, se exhibía una de las desaparecidas “en una iglesia de Betanzos”, como recoge un artículo del Anunario Brigantino de 1985.


Incluso ‘El Belga’, que pudo salir de la Modelo de Barcelona tras un acuerdo con las autoridades para su libertad provisional a cambio de colaborar en la recuperación de las piezas robadas, volvió a Santa María do Azougue. Lo hizo en los 90 y apuntó a París como hipotético destino del Misterio de La Anunciación.



Compromisos

De la visita de Calvo Sotelo pueden dar cuenta cualquiera de los ciudadanos que se acercaron a saludarlo en su recorrido por el casco histórico para acercarse a San Francisco y Santa María.


Además, unos días más tarde, el entonces alcalde, Vicente de la Fuente García, le remitiría una carta en la que señala el compromiso del Gobierno del Estado de asumir “las necesidades más prioritarias que en estos momentos tenemos y por las cuales te has interesado”, escribió el mandatario municipal el 14 de octubre 1981. Una de ellas, recuperar las tallas de Santa María. Pero se anotan algunas más: la ampliación del Museo del Traje Gallego, creado por Real Decreto de 10 de Marzo de 1974, y la cesión, por parte del Ministerio de Agricultura, de los terrenos próximos a las naves del Centro de Inseminación Artificial –ahora desaparecido– como paso imprescindible para la construcción de las instalaciones deportivas de O Carregal.


La respuesta del presidente, el día 27 de octubre: “Tomo buena nota de las necesidades prioritarias de Betanzos (...) Paso a ocuparme de ellas y te mantendré informado”, escribió Calvo-Sotelo.

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