Vilarrodís y Meicende son los primeros lugares en estrenar bancos y bonsáis

Vilarrodís y Meicende son los primeros lugares en estrenar bancos y bonsáis
vista de una de las actuaciones de meicende susy suárez

Pequeños espacios en los que sentarse a charlar entre los vecinos de la zona. En algunos lugares, como Meicende, este hecho cotidiano era casi una misión imposible. Algunos están de estreno y ya pueden compartir tardes al sol, entre conversación y conversación. El motivo es que,                                                                                                                                              dentro del programa de humanización del núcleo de Meicende, en buena parte de la travesía de Meicende los primeros bancos acompañados de pequeños árboles a imagen y semejanza de un bonsái ya son una realidad.
El Ayuntamiento de Arteixo decidió llevar a cabo esta actuación justo por la falta de espacios para el uso y disfrute de los vecinos. De hecho, el único espacio proclive a la interactuación es el parque del embalse. Por ello, el gobierno local optó por crear miniplazas donde fuera posible.

Segundo punto
Uno de los detalles que resaltaba el alcalde, Carlos Calvelo, durante la presentación de este programa de actuaciones es que tanto Meicende como Vilarrodís han crecido de forma lineal y a los pies de una carretera con mucho tráfico. Este, alegaba, es uno de los motivos por los que no tenían espacios de esparcimiento adecuados para los residentes.
Por ello  se consideró que Vilarrodís debería ser el segundo lugar en el que llevar a cabo este programa de humanización.
Entre las actuaciones previstas se encontraba la remodelación de una plaza en la que no había nada, ningún elemento para el disfrute vecinal en el entorno de la rotonda de O Seixedo, junto a la cervecería de Sampaio. En este caso, ya se puede disfrutar de una zona nueva y reservada para los vecinos tanto mayores como niños, que ya tienen un sitio en el que reunirse.
Además de ofrecer un lugar en el que pasar la tarde, o un rato, el Ayuntamiento vio la necesidad de reorganizar una serie de aspectos que beneficiasen el día a día vecinal. En este aspecto, el alcalde resaltaba la importancia de la ampliación de la seguridad con la mejora de la iluminación en las inmediaciones de los pasos de peatones, en cuyas inmediaciones se prohibirá aparcar y, si es necesario también se modificarán las paradas de autobús, con el mismo objetivo.
En este primer paquete de actuaciones el Ayuntamiento de Arteixo ha invertido 260.0000 euros. Con estos miles de euros, Carlos Calvelo quiere darle un nuevo aire a estos dos pueblos, en los que la monotonía urbanística es lo más característico.
En segundo lugar, pero no menos importante, la incidencia del tráfico justifica la mejora de seguridad para los peatones.
El proyecto continuará. Una vez que terminen en Vilarrodís y Meicende, las actuaciones se ejecutarán en Oseiro y Pastoriza. En estos casos se repiten las circunstancias: crecimiento a orillas de una carretera con un tráfico considerable, pocos espacios para los vecinos y una necesidad de humanizar el entorno y darle un aspecto más amable. Con la suma de núcleos, el programa alcanzará los 916.000 euros, explican desde el gobierno local.

Vilarrodís y Meicende son los primeros lugares en estrenar bancos y bonsáis

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