Un reflejo en imágenes de los cambios vitales, lo emocional y la energía

Son un trío que se complementa a la perfección. Las personalidades “extremas” de Javier Alvedro y Susana Shalabi han encontrado su punto de “equilibrio” con la “calma” de Javier “Lobo” Pérez, como asegura este último. Los tres representan a ese tipo de gente que, de no conocerse, terminarían por encontrarse en el camino y algo así les ha pasado. El resultado, “REseteados” un reflejo del momento vital en el que se encuentran estos arteixáns.

Shalabi llega desde Barcelona después de que una rotura de la muñeca derecha le llevase a aprender a pintar con las dos manos y Alvedro regresa de Santiago, cámara fotográfica en mano. La banda sonora de esta experiencia corre a cargo del más “tranquilo” de los tres, Pérez.

Tres arteixáns se alían para componer la muestra “REseteados”

“Todo é espontáneo, pero está pensado”, indica Alvedro para explicar en esta paradoja la serie de fotografías que ha tomado a lo largo de unas de excursiones por Galicia en las que no han faltado sus dos compañeros.

La interpretación de esos momentos parte de las ilustraciones de la artista ambidiestra. Como en todo buen viaje, esos recuerdos y la emotividad no solo se perciben con la retina.

Las vibraciones no solo son el colorido o los paisajes de una belleza característica de Galicia, el corazón también se escucha y en este caso, la presentación de la muestra contó con las canciones que ofrecen la propia interpretación de Pérez y que eran el último ingrediente de una receta que “sin ser consciente, captas a sensación e o conxunto parece un conto”, afirma Alvedro.

El conjunto de imágenes y música son el reflejo de un “viaje emocional” en el que las experiencias vividas entre los tres han supuesto un balón de oxígeno. Acontecimientos que les lleva a no quedarse quietos y a pensar ya en futuros proyectos. n