Reportaje | Respeto y deportividad, los protagonistas de los Xogos da Amizade

Medio millar de niños de entre 3 y 16 años participaron ayer en la XXVI edición de los Xogos da Amizade, una cita que cada año fomenta, a través del judo, los valores de la igualdad, el respeto y el juego limpio en el deporte. El pabellón del colegio Rías Altas, en Culleredo, se llenó durante toda la mañana para acoger los torneos, en los que estaban inscritos centros y gimnasios del municipio y de otros territorios como Cambre, Oleiros, Carral, Carballo, A Coruña, Arteixo, Narón o Ferrol.
Los deportistas realizaron entrenamientos, técnicas y caídas de judo, así como juegos, con el objetivo, explica el organizador del evento, Alejandro Abando, “de fomentar la deportividad, el buen ambiente y la igualdad entre niños y niñas”. Dentro de que el judo es un deporte de combate, Abando explica que la jornada se desarrolló “entre risas” y agradece al Ayuntamiento y a los efectivos de Protección Civil y Policía Local su colaboración, así como a los clubs participantes “por su confianza”.
Aunque todavía no es el trofeo Miguelito –que cada año reúne a más de 3.000 judocas en el Coliseum–, los Xogos da Amizade son ya una cita deportiva imprescindible en Culleredo y tienen vocación de continuar. “Pensamos en ir aumentando poco a poco el número de inscritos”, concluye Alejandro Abando.