11º-16º
martes | 16 abril | 2024
Éxito de visitantes en la Feira Franca Medieval de Betanzos. La recreación de la Expulsión dos Leprosos al Lazareto de A Magdalena es uno de los actos principales del tercer y último día de la cita, convertida en una de las celebraciones históricas más importantes de Galicia. Una escena en la que se reviven acontecimientos propios del siglo XV.
Los betanceiros enfilan A Porta da Vila con una entereza y altanería que cualquiera diría que delante de ellos va un carro tirado por dos bueyes cargado con “enfermos” camino del Mendo.
Los vecinos engalanan puertas y ventanas, acicalan calles y plazas, y ponen a punto las vestimentas, llenas de color, dispuestos a disfrutar de la clausura, que se alarga hasta la tarde con el Torneo Medieval en O Campo. Los visitantes, sorprendidos y entusiasmados con el maquillaje de los voluntarios, asisten con alegría al espectáculo del “exilio extramuros” de los “malditos”, mientras los más pequeños, entre asustados y ajenos a la desgracia de aquellos que piden “piedade”, disfrutan de las actividades dispuestas para ellos en la plaza de García Irmáns, a sólo unos metros de la arena sobre la que cabalgarán los hombres de Fernán Pérez.
La Feira Franca de Betanzos, que alcanza su vigésima edición, es una colisión entre dos siglos y dos sociedades; el sueño de los niños y la complacencia de los adultos; el presente entregado a los excesos del pasado de la mano de señores como el de Andrade, el único al que llamaron “Bó”, o reyes como Enrique IV de Trastámara que, en agradecimiento a su fidelidad, concedió a Betanzos el título de ciudad en 1465.
