Reportaje | El área metropolitana deja pasar el tren de sus estaciones de ferrocarril

Reportaje | El área metropolitana deja pasar  el tren de sus estaciones de ferrocarril

“Las estaciones están cerradas al servicio y convertidas en apeaderos sin personal en toda la línea. Si a los betanceiros que vivieron entre la inauguración de la línea y finales de los sesenta les dijeran que un día la popular y laboriosa estación la iban a cerrar al servicio, suprimiendo su numerosa plantilla de agentes, les parecería increíble”.

Esta reflexión de Antonio Gutiérrez Morán, especialista en historia del ferrocarril, para el Anuario Brigantino de 2006, podría aplicarse no solo a Betanzos sino a la gran mayoría de las estaciones ubicadas en los márgenes de los caminos de hierro del área metropolitana coruñesa.

Son doce las instalaciones ferroviarias que el Adif tiene en propiedad con mayor o menor fortuna en lo que respecta a su mantenimiento. Sin embargo, lo que es indudable es que las consideraciones de Gutiérrez Morán continúan siendo válidas más de una década después.

Salvo honrosas excepciones, como O Burgo o Curtis, el resto de antiguas estaciones se han convertido en meros apeaderos que languidecen entre la indiferencia de las entidades privadas y públicas, y tan solo inversores privados se han decidido por dar una segunda oportunidad a unos inmuebles profundamente marcados por la escasez de usuarios de tren y, cómo no, por la tan anunciada como esperada llegada de la Alta Velocidad.

Línea A Coruña-Santiago 
Las dos estaciones ubicadas en el tramo ferroviario A Coruña-Santiago, que forma parte de la línea A Coruña-Zamora, conocida como el Directo de Galicia, fueron inauguradas en el año 1943.

La tipología de los apeaderos de Uxes y Bregua es bastante curiosa porque no hay un diseño común y jerarquizado de los edificios, como solía ser habitual, y porque los diversos estilos utilizados remiten estéticamente a estaciones como la de Azpeitia y otras de Euskadi.

Las intervenciones sobre el trazado de la vía, durante la década pasada, para conformar lo que se ha dado en denominar Eje Atlántico, supusieron el cierre de ambas estaciones.

La reutilización de los dos inmuebles, indican los expertos, se ha convertido en una cuestión especialmente compleja. Fundamentalmente por su localización y también por su dimensión.

La de Uxes alberga desde hace varios años un establecimiento hostelero y continúa con su función de apeadero; aunque del vitalismo que se supone debió tener antaño más bien poco queda.

Por su parte, pudo ser la estación de Bregua la única de la comarca para la que se había establecido un proyecto patrocinado por una Administración pública.

El Gobierno local de Culleredo que hasta hace poco más de un año presidía el socialista Julio Sacristán diseñó allá por el año 2006 una iniciativa con la que esperaba que el inmueble, situado en este núcleo de la parroquia de Veiga, sirviese para una función social.

El Ayuntamiento solicitó al Adif que le cediese el tramo que ocupaban las vías pero el Gobierno se negó, en su momento, alegando que volvería a utilizarlo para dar servicio al Puerto Exterior de punta Langosteira.

Tras la desilusión inicial, el Gobierno local transformó el proyecto convirtiéndolo en una “vía verde” que enlazará Orro y Boedo. Está previsto crear puntos de descanso y servicios que permitirán hacer paradas o acoger actividades vinculadas a la naturaleza. Y en las inmediaciones se crearán zonas de aparcamiento.

Pero, hasta ese momento, la instalación de Bregua alberga un establecimiento hostelero y un local para una entidad deportiva.

Línea A Coruña-Lugo 
Las ocho estaciones ubicadas en el tramo ferroviario A Coruña-Lugo, que forma parte de la línea A Coruña-Palencia, fueron todas ellas inauguradas en 1875.

Se caracterizan todas ellas por su similitud y una tipología que los especialistas califican de clásica. Se trata de inmuebles dividos en dos alturas: el espacio inferior para los usuarios del tren y el superior para vivienda del responsable de la estación.

Es en este tramo donde la iniciativa privada intentó con diversa fortuna dar una segunda oportunidad a los inmuebles. La que, por el momento, parece tener éxito es la de O Burgo. Varios establecimientos hosteleros ocupan las estancias anexas a la estación que, sin embargo, presenta un estado francamente mejorable ya que las pintadas y los grafitis se han adueñado de las fachadas.

Asimismo, una cafetería ocupa la parte baja del apeadero de Curtis que, por cierto, está siendo objeto en estos momentos de una mejora de su estructura.

No tuvo suerte, sin embargo, la estación de Cambre. Incluso un restaurante con una Estrella Michelin tuvo que cerrar sus puertas después de varios años ocupando el inmueble. 

Línea Betanzos-Ferrol 
Las estaciones de Betanzos-Ciudad y Miño son las que se ubican en la línea Betanzos-Ferrol inaugurada en 1913, de lo que da fe una placa inaugurada por el Gobierno local brigantino hace ahora casi nueve años, en la primera.

Ambas, de marcada tipología clásica, sirven a sus fines de apeadero, aunque la de Miño una entidad vecinal la utiliza de vez en cuando para reuniones.

 

Una placa recuerda su inauguración en 1913

El ferrocarril llegó a Betanzos-Ciudad el 5 de mayo de 1913 con la apertura de la línea Betanzos-Ferrol. Una placa recuerda el centenario de la inauguración de la estación construida en un estilo muy clásico.

 

La Alta Velocidad la transformó en un bar

La estación de Bregua entró en servicio en 1943, con la apertura del tramo Santiago de Compostela-A Coruña. Actualmente el edificio de estilo montañés se ha convertido en un establecimiento hostelero debido a la llegada de la Alta Velocidad.

 

Varios proyectos hosteleros fallidos

Como otras tantas en el área metropolitana, la estación se inauguró en 1875 como parte del tramo A Coruña-Lugo. Una vez sin servicio, varios proyectos hosteleros que se pusieron en marcha en sus instalaciones resultaron fallidos.

 

Un apeadero dedicado a vivienda particular

La estación fue inaugurada en 1875 con la apertura del tramo A Coruña-Lugo de la línea férrea que pretendía unir Palencia con A Coruña. Hoy en día se ha convertido en un apeadero y una de sus plantas superiores se ha destinado a vivienda particular.

 

Una estación que dio origen a un pueblo

La vitalidad que supuso la apertura de esta estación dio origen a la actual población de Curtis-Estación. Entró en funcionamiento en el año 1875, en el que se abrió el tramo A Coruña-Lugo de la línea férrea que pretendía unir Palencia con A Coruña. 

 

El Estado se encargó de su construcción

La estación entró en servicio en 1913 con la apertura de la línea Betanzos - Ferrol por parte del Estado que tuvo que encargarse de la construcción de la línea al quedar desiertos las diferentes subastas que se fueron celebrando.

 

La primera estación de ferrocarril brigantina

La estación fue inaugurada el 10 de octubre de 1875 con la apertura del tramo A Coruña-Lugo de la línea férrea que pretendía unir Palencia con A Coruña. Se trata de la primera infraestructura que se construyó en el municipio brigantino.

 

La iniciativa hostelera se ha consolidado

La apertura del tramo A Coruña-Lugo de la línea férrea destinada a enlazar Palencia con A Coruña en 1875 marcó el inicio de esta construcción. Se ha convertido en una de las pocas instalaciones ferroviarias donde las iniciativas hosteleras se han consolidado.

 

Apeadero con uso residencial

Desde la inauguración de la estación en octubre de 1875 con la apertura del tramo A Coruña-Lugo, ha mantenido su vínculo ferroviario, aunque ahora convertida en apeadero. Una de sus plantas superiores, además, se ha destinado a vivienda particular.

 

Un estilo arquitectónico marcadamente montañés

La estación de Uxes entró en servicio en 1943, con la apertura del tramo Santiago de Compostela-A Coruña. Al igual que su “hermana” de Bregua presenta un estilo marcadamente montañés y desde hace años se destina a usos hosteleros

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