La apertura del Centro Internacional de Estampa Contemporánea (CIEC) se convirtió en el acontecimiento del año en As Mariñas. Transcurridos casi dos decenios, la institución atraviesa una situación crítica, y cualquier operación encaminada para garantizar la continuidad de las instalaciones es bien recibida en Betanzos.
En este momento son varias las alternativas y, según ha podido saber El Ideal Gallego, al menos dos instituciones con un amplio recorrido en los ámbito de la cultura y la puesta en valor del patrimonio estudian las posibilidades del CIEC. Una de ellas es Afundación y, con esta intención, con el propósito de conocer el centro y sus opciones, se desplazó hasta la ciudad su presidente, Miguel Ángel Escotet Álvarez.
El alcalde, Ramón García Vázquez, eludió entrar en detalles y, al ser interpelado sobre esta cuestión, se ciñó a confirmar que había instituciones de calado valorando alternativas para el CIEC.
La colección de la Fundación Centro Internacional de Estampa Contemporánea supera las 3.000 obras, incluidos varios Picasso, Miró, Dalí, Clavé, Sampere, Cano-gar... Además del valor añadido que suponen los más de cien artistas que han pasado por sus talleres solo en 2016. “Los testimonios vivos de la cultura y la vida de Betanzos”, apuntó en una entrevista concedida a este diario su promotor, el betanceiro Jesús Núñez. Para hacerse una idea de la repercusión que la Fundación CIEC tiene en el resto del mundo, además de las procedencias tan dispares de los alumnos que asisten a sus cursos especializados, están las numerosas colaboraciones establecidas por el centro, traducidas en numerosos intercambios de artistas, alumnos y profesores que cada año convierten el espacio en un referente internacional desde sus primeros cursos, en los 90. Unos talleres que se imparten en inglés, en francés, en italiano, e incluso en árabe, como el que en 1998 acercó hasta la ciudad a artistas de Egipto, Arabia, Jordania, Sudán, Líbano, de la mano del profesor Rashid Diad.
Además, el inmueble del CIEC cumple cien años este 2017. Los Núñez encargaron al coruñés González Villar un edificio destinado a albergar los primeros grandes almacenes de Galicia. Además de secciones de confección y mueblería, había una sucursal del Banco de España. En ellos se forjó parte de la historia comercial de As Mariñas. l