La gran devoción a la Virgen Milagrosa centró los actos en Carballo y Caión

Los vecinos de Carballo volvieron a demostrar una vez más su gran devoción a la Virgen de la Milagrosa participando ayer en el día grande de las fiestas del barrio en el que se asienta su capilla, que contó con un seguimiento multitudinario.

El sol y las altas temperaturas acompañaron a los actos religiosos que se desarrollaron al mediodía en el exterior del templo y que se iniciaron con la misa solemne en honor a la Milagrosa presidida por el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, y con la presencia del grupo de autoridades municipales encabezadas por el alcalde carballés, Evencio Ferrero, y conformado por los portavoces de los tres partidos de la oposición y por los representantes de la Guardia Civil y Policía Local.

Entre los vecinos asistentes también hubo un numeroso grupo de bebés y niños que fueron bautizados y recibieron la Primera Comunión en estos dos últimos años en la parroquia carballesa, que acompañados de sus familias fueron presentados a la Virgen solicitando para ellos su amparo y protección, al igual que para todos los enfermos, algunos de ellos presentes, que también recibieron su bendición. Las ofrendas a la Milagrosa centraron una parte importante de la eucaristía, entre ellas una maqueta de la capilla que con motivo del Año Jubilar Mariano se convirtió en estos últimos años en un importante centro de peregrinación, así como los donativos de los devotos y de los funcionistas. También se ofrecieron a la Virgen las llaves de la casa de acogida para mujeres “Fogar Dona Basilisa” por parte del director de Cáritas Interparroquial de Bergantiños y del contratista de la obra, solicitando protección para todas las madres necesitadas, víctimas de la violencia de género o embarazadas sin recursos que deciden no abortar, para las que pidieron su intercesión “para que sepan cuidar a sus hijos y anunciar los evangelios de vida”.

Otro de los momentos álgidos de la celebración fue precisamente la bendición de la futura casa de acogida para estas mujeres situada en el edificio contiguo a la capilla de la Milagrosa, a donde se acercaron las autoridades políticas y religiosas para llevar a cabo el descubrimiento de la placa en la que se recoge su denominación (Casa de Acollida da Muller “Fogar Dona Basilisa”. Obra social do Ano Xubilar Mariano) y la fecha en la que fue bendecida por el arzobispo Julián Barrio.

Fue el mejor anticipo para la posterior y multitudinaria procesión con la imagen de la Milagrosa por las calles aledañas a la capilla, decoradas una vez más por las vistosas y coloridas alfombras florales que cada año dedican los vecinos del barrio a la Virgen, en esta ocasión con motivos marianos alusivos al Año de la Fe.