Franco y la ciudad que custodia la bandera republicana, treinta y siete años después

Franco y la ciudad que custodia la bandera republicana, treinta y siete años después
la fachada de uno de los edificios del grupo caneiros conserva una placa con los símbolos de falange p. puig

El mismo día en que se cumplen treinta y siete años de la muerte del dictador, en la capital brigantina debaten la oportunidad de retirar los honores con los que, en su día, el Ayuntamiento de Betanzos distinguió a Francisco Franco. Porque la ciudad que custodia la bandera del Gobierno de la II República en el exilio, la misma en la que el exministro de Justicia Franscisco Caamaño se refirió a la Ley de Memoria Histórica como “un motivo de orgullo” para toda España, sigue sin cumplir al cien por ciento las disposiciones aprobadas por el Congreso de los Diputados con fecha de 31 de octubre de 2007. Así, Francisco Franco Bahamonde sigue siendo Medalla de Oro e Hijo Adoptivo de Betanzos.

El dictador todavía es medalla de oro e hijo adoptivo de betanzos, concedidos en los años 1943 y 1937

Este martes, reunida la comisión municipal de nomenclátor y distinciones, los cuatro grupos con representación en el plenario recibieron hasta tres informes sobre el asunto que, además de analizar la concesión del título de Hijo Adoptivo en 1937, en plena Guerra Civil, y de la Medalla de Oro, en 1943, aborda, a petición del grupo nacionalista, las distinciones y reconocimientos “aos seus prohomes”, entre los que figuran José Antonio Girón de Velasco, Pérez Salas, Martín Ballesteros o Manuel Fraga.

En relación con este último, el BNG de Betanzos llama la atención sobre la fecha del otorgamiento de honores al expresidente de la Xunta: 1966. “Polo que se lle está premiando o seu papel na etapa da Dictadura” y su colaboración con el general que promovió el golpe de Estado contra el Gobierno de la República.

 

“Pocos Símbolos”

Pese a la existencia de varios procesos pendientes, fuentes municipales aseguran que “son pocos” los símbolos y denominaciones franquistas que todavía perviven en el municipio y que, en algunos de los casos, se trata de inscripciones localizadas en edificios de titularidad privada, a la espera de consentimiento por parte de sus propietarios, como es el caso de uno de los bloques del Grupo Caneiros.

En este punto, el BNG, aunque reconoce las posibles complicaciones de la administración municipal para retirar la placa instalada en la fachada, insisten en que “hai moitas maneiras de solucionar este tema ao alcance do Concello de Betanzos”.

La decisión del pleno de retirar “todas as honras que esta cidade aínda rende aos persoeiros franquistas” es anterior a la Ley de Memoria Histórica de 2007, en tanto se acordó en 2005, el mismo año en que se resolvió, por unanimidad, colocar un retrato de Antolín Faraldo Asorey en la sala capitular, en sustitución del que representa al General Pérez Salas.

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