Operarios de la empresa especializada a la que se encargó la restauración del Cruceiro de Obra de Paño, en San Juan de Lubre, se desplazaron el pasado 24 de diciembre hasta el punto para ocuparse del traslado de las piezas a sus instalaciones, confirmaron desde el Gobierno de Bergondo.
“Os traballos consistirán na reconstrución da cruz e parte do fuste danados, a súa ensamblaxe, recolocar a base do cruceiro desprazada polo impacto do vehículo e montar de novo todas as partes”, precisó el edil Juan Fariña, responsable del Área de Patrimonio. Por último, se procederá a la “aplicación dun tratamento antifungos”, apostilló Fariña.
Incidente
El día 11 de diciembre, una salida de vía provocó importantes daños en el monumento, un Bien de Interés Cultural (BIC) de importante valor, según explicaron desde el Gobierno de Alejandra Pérez Máquez. Hasta Obra de Paño se desplazaron de inmediato agentes de la Policía Local de Bergondo, que confirmaron que el hombre accidentado, un conductor novel que no resultó herido y dio negativo en el test de alcoholemia, incidía en que “algo lo había cegado” y que no había visto el cruceiro, situado en el cruce entre la carretera provincial que une Sada y Espíritu Santo, la de Soñeiro, por Alborelle, y la de Lubre.
Desde el municipio se avisó a a los responsables de la Diputación de A Coruña, titular de la carretera donde se sitúa la cruz, y horas después los técnicos del Servizo de Patrimonio de la institución provincial se acercaron a Lubre.
Hasta el día de Nochebuena, en que se procedió a su traslado, el monumento estuvo protegido por plásticos y acordonado por la Policía Local de Bergondo.
El Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) en proceso de redacción ya contemplaba la protección de este monumento con la retirada del poste de la luz existente, casi pegado a la columna, que se desplazó hasta retirar las piezas, y el soterramiento del cableado aéreo en este cruce de Obra de Paño.