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jueves | 18 abril | 2024
No es la primera ni será la última vivienda que deba vallarse en Betanzos. Pero la situación de los números 52 y 54 de la calle de A Ribeira también ha obligado a desviar el tráfico y habilitar un carril de acceso a la ciudad por el Paseo do Malecón del Mandeo. El Ayuntamiento de Betanzos ha concedido un plazo de 24 horas a los propietarios para adoptar las medidas de seguridad necesarias ante el mal estado en que se encuentran las dos viviendas señaladas, al borde de la N-651.
El gobierno local solicitó autorización a la Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia, con competencias sobre la vía, para acordonar la zona, y solo 12 horas después, técnicos del Ministerio de Fomento se desplazaron hasta Betanzos para señalizar el tramo y colaborar con el consistorio brigantino en el vallado, a unos metros de la subida al casco viejo por Os Cabildos.
Los servicios municipales emitieron un informe sobre el estado de los inmuebles y, según fuentes del equipo de gobierno, se le concedió un plazo de 24 horas a los propietarios para, en un primer momento, adoptar una serie de medidas de protección y seguridad que, posteriormente, tendrán que completar con nuevas actuaciones que garanticen la estabilidad de las viviendas situadas en los números 52 y 54.
En caso de que los titulares hagan caso omiso a este requerimiento, será el propio Ayuntamiento de Betanzos el que ejecute de forma subsidiaria de los trabajos, pasando el coste de la intervención a los dueños de las casas afectadas en A Ribeira.
Tercer Edificio
Aunque en un primer momento se decidió vallar el entorno de las viviendas y permitir la circulación de vehículos, finalmente, responsables y técnicos municipales decidieron cortar el tráfico y desviarlo por O Malecón, habilitado con doble sentido, a la espera de que se realicen las obras solicitadas a los titulares de los edificios de A Ribeira.
Por otra parte, el consistorio solicitó la intervención de los bomberos del parque comarcal para retirar diversos elementos del inmueble del número 59, justo enfrente a las casas valladas, que corrían riesgo de desprenderse y que, teniendo en cuenta que, en principio, se pretendía disponer una zona para el tránsito de vehículos, entrañaban cierto peligro para los conductores que, en sentido Ferrol.
Los servicios de emergencias desplazados hasta el punto indicaron que su intervención se redujo al desmontaje de uno de los balcones del inmueble, que amenazaba con precipitarse sobre la vía, en la N-651.
