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miércoles | 24 abril | 2024
La Guardia Civil y la Policía Nacional consideran desarticulada la banda del “Apache”, como llaman al líder de un grupo de narcotraficantes que transportaba cocaína y hachís desde Vilagarcía de Arousa hasta un piso de O Burgo, desde donde lo distribuían a los minoristas. Las primeras detenciones se hicieron a principios de mayo, pero no fue hasta ayer que las autoridades dieron por concluida la operación “Marmitaco-Apache”, que se saldó con la detención de una docena de persona, nueve kilos de cocaína, 16 de hachís , 40.000 euros en efectivo y, curiosamente, un lingote de oro.
Tras una larga vigilancia, los investigadores descubrieron que trasladaban la droga desde Vilagarcía hasta O Burgo en una vehículo con un compartimento para ocultar la mercancía que se abría con un sistema hidráulico. Llegaban directamente al garaje de la comunidad, donde tenían un piso en el que no vivía nadie, únicamente para almacenar la droga, y que había adquirido uno de los narcos, el que residía en Vilagarcía de Arousa; los tratos los hacían en el garaje comunitario.
La operación fue llevada a cabo por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de A Coruña, y el Grupo de Tráfico Medio de Estupefacientes de la Comisaría Provincial, el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de la Guardia Civil, y el Grupo de Respuesta Especializada contra el Crimen Organizado (Greco). En total, unos veinte agentes.
En libertad con cargos
El “Apache” y su banda cayeron a principios de mayo, cuando se registró el piso de O Burgo, así como un chalé en Oleiros, y otra vivienda en Vilagarcía de Arousa. En total, siete personas, la mayoría de ellas en el área. Después se detuvo a otros cinco sospechosos, también en A Coruña, pero posteriormente fueron puestos en libertad con cargos.
Se trata de una operación importante, sobre todo al llevarse a cabo en los alrededores de A Coruña, donde no es habitual encontrar un grupo que trafique con cantidades tan grandes. El “Apache” y sus secuaces no despertaban sospechas porque no llevaban un tren de vida muy lujoso, sino que se mostraban muy discretos. Sin embargo, durante la operación se incautaron seis vehículos, así como una prensa hidráulica y dos máquinas de contar dinero.
