Culleredo-Sacristán pide ayuda al Gobierno para evitar la celebración de fiestas ilegales

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  El alcalde de Culleredo, Julio Sacristán, ha solicitado ayuda al Gobierno, a través de su delegación en Galicia, para evitar la celebración de fiestas ilegales, denominadas “raves”, que se organizan desde hace varios años, los fines de semana, en el entorno de la ermita de San Cosme y en el antiguo Polvorín de A Zapateira.

Según fuentes municipales, estas “raves” se celebran principalmente las noches de los viernes y de los sábados y en ella se reúnen principalmente jóvenes.
Estas concentraciones se organizan, según ha podido saber el gobierno local cullerdense, mediante convocatorias por internet y teléfono móvil, al tiempo que se sospecha que las fiestas están promovidas por personales vinculadas al tráfico de estupefacientes.
Las fiestas, que suelen durar hasta altas horas de la madrugada, congregan a un gran número de personas y vehículos, poniendo en riesgo la seguridad de los que asisten y de los propios vecinos. Además, se suelen utilizar equipos de música de gran potencia que generan molestias a los residentes en las inmediaciones.
Por ello, el Ayuntamiento de Culleredo solicitó a la Delegación del Gobierno su colaboración para erradicar estas celebraciones, al tiempo que ha dado orden a la Policía Local que impida mientras tanto su organización.
El equipo de gobierno cullerdense espera que la actuación de las fuerzas de seguridad finalice con estas concentraciones, que además de su carácter ilegal y de causar molestias a los vecinos, suponen un peligro para los propios asistentes.
El Ayuntamiento colocará barreras en el acceso a la ermita de San Cosme para impedir la entrada de vehículos y el paso sólo se abrirá para la celebración de determinados actos como las fiestas.

Muertes en Madrid > Cabe recordar que el pasado mes de agosto dos jóvenes de 18 años de edad fallecieron cerca de una finca abandonada en el municipio madrileño de Getafe, donde se había celebrado una “rave”.
Otro joven que también estuvo en la celebración tuvo que ser hospitalizado en estado muy grave. Los posteriores análisis que se les practicaron a los cuerpos revelaron que habían consumido alcohol, “speed” (una droga basada en la anfetamina) y estramonio, una planta de efectos sedantes y alucinógenos cuyo principal componente es la atropina, una droga empleada en algunos medicamentos.
Según indicaban los investigadores los jóvenes se envenenaron con el consumo de la planta y su estado se agravó por el consumo de varias pastillas. Uno de los asistentes a la fiesta declaró a la policía que habían consumido drogas durante la noche en dosis excesivas.