La ciudadanía denuncia más emisiones de humo de la planta de serrines de Talai

Vecinos del núcleo de Talai advirtieron en los últimos días de la intensa humareda procedente de una planta de serrín situada a escasos metros de las viviendas y que, según denuncian estos ciudadanos, genera problemas de salud e incumple la normativa de humos y ruidos de Betanzos.
Teniendo en cuenta las protestas de estos días, el BNG solicitó al Gobierno de Ramón García Vázquez que actúe “diante das queixas veciñais” por las emisiones de Visecorsa en Talai. “O pasado xoves durante toda a tarde e até entrada a noite esta empresa emitiu un fume negro e denso visíbel perfectamente mesmo desde o centro que volveu desatar as queixas da veciñanza de Talai e dos veciños e veciñas de Betanzos”, explicó el portavoz nacionalista, Henrique del Río. 
Además, el partido frentista anunció que trasladará este tema al pleno municipal que se celebra este martes y pedirá al equipo dirigente que actúe de inmediato y reclame de la Xunta, como administración competente en materia de medio ambiente, las mediciones oportunas para garantizar que esta empresa cumple con la normativa en materia ambiental virgente en Galicia. “Parece obvio que a actividade dunha empresa ten que ser compatíbel coa saúde e co coidado do noso medio e o concello terá que actuar para garantir o benestar dos veciños e veciñas”, indicó Del Río.

Origen
El portavoz nacionalista señaló que hace tres años, cuando se abrió esta planta en Talai, el BNG “xa trasladara varias veces ao Concello de Betanzos en apoio aos veciños e veciñas a súa oposición a que unha empresa destas características, que emite ruídos e fumes se instalase a carón das vivendas”, continuó el edil del Bloque de Beatanzos.
Este empresa se instaló en la antigua Maderas Betanzos, y ya entonces, “se advertiu de que non era un serradoiro nin unha pequena empresa familiar e que, polo tanto, non era o lugar para que se establecera unha empresa coma esta”, recordaron los nacionalistas, que consideran que en la comarca betanceira se dispone  de suelo industrial sin ocupar en los polígonos, siendo este el emplazamiento que, para los nacionalistas, resulta “máis idóneo para fábricas con emisión de fumes e ruídos”, apostilló Del Río.
Con todo, el Ayuntamiento de Betanzos otorgó a la empresa la correspondiente autorización “e se negou a negociar coa dirección que se establecera noutra ubicación”, lo que en su día alteró los ánimos de los ciudadanos, que vieron como se acometían obras de ampliación de la antigua maderera y, sobre todo, como se instalaba la chimenea de tres metros de altura de la que ahora salen los humos por los que protestan los vecinos de Betanzos. 
Los residentes en el entorno denunciaron varias veces episodios de hedores y sus sospechas de que la empresa desarrolle actividades relacionadas con la gestión de residuos,  que es otras de las ramas de actividad de esta sociedad, pero estas nunca pudieron confirmarse en Betanzos. l