Decepción, frustración y pena, una inmensa pena, es lo que dejó la madrugada de ayer a miles de personas que el globo de Betanzos no volase por vez primera en décadas.
Y son ya tantas que nadie atinaba a dar el número exacto de años que el aerostato de papel más grande del mundo no se elevaba desde la plaza de los hermanos García Naveira sin rumbo fijo pero que tampoco importaba demasiado.
Fue precisamente ayer cuando, por un cúmulo desafortunado de circunstancias, entre ellas el viento reinante, San Roque no recibió su regalo en forma de esfera como es costumbre desde tiempo inmemorial.
El episodio que será recordado durante años por su tristeza ha supuesto, según lo definió la alcaldesa, María Barral, un “mazazo para todos los que amamos el globo”.
Ella, en nombre de toda la corporación, quiso dar todo el apoyo del Ayuntamiento a la familia Pita, encargada de hacer realidad el aerostato año tras año, y a todos los que de una forma u otra convierte en posible una ya más que tradición.
Sin embargo, las fiestas continúan y los brigantinos tratarán de quitarse este mal sabor de boca participando hoy en la primera jira a Os Caneiros.
Charanga NBA
A partir de las doce del mediodía comenzarán a desfilar por el río Mandeo las embarcaciones hacia el campo animadas por la música de las charangas NBA y DGT. Al regresar espera a los romeros una verbena amenizada por la orquesta La Favorita en la plaza de los hermanos García Naveira.
Esta jira contará con un dispositivo especial de seguridad compuesto por más de un centenar de personas entre voluntarios de Protección Civil, Cruz Roja, Policía Local, Guardia Civil y personal de los servicios municipales.
Además de los puestos base de urgencias que se establecerán en el paseo de la Tolerancia y en el campo de Os Caneiros, varias zodiac de Protección Civil recorrerán el río en labores de vigilancia. Se controlará, de forma especial, la venta de bebidas alcohólicas a menores y se prohibirá la navegación por el río de motos acuáticas, contra las que también se ejercerá un control riguroso.
El Ayuntamiento volvió a insistir en distintos mensajes “de concienciación” para conservar la tradición. La alcaldesa hizo un llamamiento a los participantes a los que pidió “respeto hacia los demás”.l