Arteixo se queja en el Consorcio por las deficiencias de la labor de Cespa

El Ayuntamiento de Arteixo volverá a plantear una queja al Consorcio As Mariñas para que se obligue a la empresa Cespa a cumplir el contrato del servicio de recogida de basuras.

Según fuentes municipales, la concesionaria dejó sin recoger los residuos de la plaza de As Viñas, situada en el núcleo urbano arteixán, “lo que viene a sumarse a una larga lista de incumplimientos en el servicio”.

Las mismas fuentes indican que con anterioridad ya se denunció el mal estado de los contenedores, tanto en lo referente a los malos olores como a las roturas que presentan.

“Otra de las quejas del Ayuntamiento de Arteixo es el incumplimiento en las zonas rurales de los dos días de recogida de residuos que hay por contrato, puesto que en ocasiones los camiones de recogida solo pasan un día a la semana”, añaden.

Injustificable
El Gobierno local afirma que no ve justificado que una empresa privada que, según él, cobra a nueve ayuntamientos el recibo de basura más caro de Galicia ofrezca un servicio tan deficiente. Asimismo, extiende esta opinión al funcionamiento de la gerencia del Consorcio.

“Tiene prácticamente como única actividad continua controlar la recogida de los residuos y, sin embargo, no es capaz de controlar en este servicio unos mínimos niveles de calidad, ya sea en cuanto a la propia calidad de recogida diaria o los niveles de reciclaje, puesto que una gran parte de los residuos se están tirando en vertederos al aire libre, con los consiguientes perjuicios medioambientales”, apostilla.

Además, el Ayuntamiento insiste en que continúa con el proceso para convertir en público un servicio ahora privado.

“Tras licitar el material necesario para municipalizar el servicio en 2018, el Gobierno local aprobará un concurso público de empleo abierto a todos los ciudadanos para dotar los 26 puestos de trabajadores necesarios para asumirlo. También rebajará el recibo de los 126 euros anuales actuales a 100 o menos”, añade.

El nuevo plan de residuos de Arteixo propone la recogida en un modelo de cinco fracciones, que estarán físicamente situadas en isletas con otros tanto contenedores de diversos colores.