El departamento municipal de Juventud ha mejorado en los últimos días la acústica de los locales de ensayo gracias a una subvención de los fondos europeos Feder, que se destina al equipamiento de las instalaciones que se utilizan para la realización de actividades culturales.
Los trabajos consistieron en eliminar la moqueta existente y colocar en el suelo del local un sistema de tarima flotante de alta densidad, que fue instalada sobre dos capas de material especial acústico. De este modo se anularán las vibraciones producidas por la placa, evitando gran parte de las ondas estacionarias molestas.
Según el edil de Juventud, Fernando Caride, “a obra evitará aos grupos molestias que antes percibían como consecuencia da moita vibración e do rebote dos sons”.
También se han cambiado las luminarias fluorescentes de superficie, ya que las existentes son extremadamente sensibles a vibraciones por presión sonora. De este modo, se instalaron otras que son menos sensibles en este sentido.