
Mes a mes la ruta A Coruña-Barcelona, operada por Vueling, registra ocupaciones que rozan el lleno. Los últimos datos que se conocen son los de junio, cuando los aviones volaron, de media, al 90% de ocupación. Esto, sumado a los insuficientes y hasta considerados “malos” horarios de la conexión, lleva al sector a insistir en la necesidad de aumentar frecuencias y contar con una compañía que haga competencia a la aerolínea catalana en Alvedro.
“La apuesta de Vueling en Galicia es Santiago, algo que consideramos un grandísimo error y el tiempo nos acabará dando la razón”, señala el portavoz de Alvedro Vuela Más Alto, Alberto Maroto. La alta ocupación, comenta, significa que “la demanda de estos vuelos está muy por encima de la oferta, por lo que faltan frecuencias”.
Vueling ofrece dos enlaces para volar entre ambas ciudades: primera hora de la mañana y última del día. Dependiendo del día, un vuelo parte de el Prat entre las 05.55 horas o las 07.50, para realizar el trayecto inverso entre las 08.20 o las 10.15 horas. Por la noche, una aeronave sale de Barcelona entre las 20.15 y 21.25 horas, para regresar a las 23.50 –el aterrizaje en el Prat es a las 01.35–.
“Lo ideal sería que se reforzase la operativa y que entrase un competidor, ya que Vueling no tiene competencia y nos considera un aeropuerto residual en su operativa”, añade Maroto. Este, además, explica que la aerolínea “pone los horarios que consideran porque están acomodados y les da dinero, ya que pueden poner los aviones a las horas que quieran que los van a llenar igual”.
La ruta a Barcelona fue operada en el aeródromo de A Coruña por Spanair y Vueling de forma simultánea. Hasta la quiebra de la primera compañía, en 2012, esta conectaba Alvedro con El Prat entre dos y tres veces por jornada. Vueling, por su parte, ofrecía una o dos frecuencias diarias.
