La sala de estar de la Sagrada Familia se amuebla: la ronda peatonal presenta su decoración
Bancos circulares, tableros de ajedrez o grandes maceteros ya ocupan espacio en la reformada calle

La transformación de la calle Sagrada Familia, por la que pasará la ronda peatonal que conecta A Gaiteira con el Agra do Orzán, es cada vez más evidente. Las obras todavía siguen en curso, pero hace unos días llegaron a la vía los elementos urbanos que cambiarán las costumbres de los vecinos, que ganarán espacio para el ocio y disfrute de su barrio. Como si de una mudanza se tratase, los camiones descargaron los bancos, maceteros, mesas y tableros de ajedrez que decoran la calle, dando una nueva estética a la misma.

Este lunes por la mañana muchos de los viandantes se detenían a observar el mobiliario. El elemento que más llamaba la atención no era otro que los tableros de ajedrez. “Está bien para tomar el aire y entretenerse cuando no llueva”, comentaba Alfonso. Otros no se resisten al fin de la obra para probar los bancos allí instalados, y los maceteros esperan la plantación de los árboles que dotarán de naturaleza el entorno de la plaza de San Rosendo. Además de los bancos de hormigón, en la calle se han colocado modelos ‘híbidros’: en formato circular, sirven como macetero en el centro y como asiento en el borde de la circunferencia.
Tomar 'la fresca'
La Sagrada Familia es el último ejemplo de las ‘salas de estar’ callejeras que surgen de las obras de reurbanización que ejecuta el Gobierno municipal. La anterior fue Pla y Cancela, donde los jardineros dispusieron las macetas que adornaban de forma semicircular, con un banco, en el cruce con la calle de Juan Castro Mosquera. En los últimos años, se han multiplicado por toda la ciudad.

Hace unos meses el director territorial de Galicia de la consultora inmobiliaria Gesvalt, Roberto de Castro, aseguraba a este diario que el resultado de la obra será positivo, tal y como ocurrió en otras zonas de la ciudad en la que se llevaron a cabo peatonalizaciones. La Sagrada, dice, está llamada a emular una tradición del sur, la de “tomar la fresca”, algo que ya se puede ver en los bancos instalados. “Se ve que en A Coruña las peatonalizaciones tienen bastante contestación ciudadana”.


