12º-16º
martes | 21 mayo | 2024
El nuevo Presco está en boca de todos. Ya no solo las agrupaciones de la corporación municipal debaten sobre su desenlace, sino que los sectores implicados esperan como agua de mayo su aprobación.
Precisamente este mes terminarán, si nada lo impide, las negociaciones para su desarrollo, que, según fuentes municipales, tendrían que ser aprobadas en pleno a finales de mayo.
La Federación Unión Comercial Coruñesa (FUCC) y representantes de otros colectivos se reunirán con el Gobierno local el próximo lunes 10 de mayo para ultimar detalles y dar el visto bueno a la iniciativa. El comercio coruñés ya ha expresado en numerosas ocasiones su deseo de que los bonos de consumo regresen cuanto antes, ya que la primera campaña del Presco supuso “una salvación”.
De esta forma, el tesorero de la FUCC, Abel Caballero, y el presidente de la entidad, José Luis Boado, aguardan que los bonos “lleguen cuanto antes”, sobre todo ahora que muchos comercios “han agotado su capacidad de resistir”. En la reunión del 10 de mayo, además, se debatirán las subvenciones a las asociaciones, de forma que fomenten la dinamización comercial.
La implantación de los bonos de la Xunta, que empiezan a funcionar esta próxima semana, supuso una inquietud acerca del futuro del Presco para el comercio.
Bonos de la Xunta
“Tenemos la sensación de que los bonos de la Xunta retrasarán la llegada de los del Ayuntamiento, ya que no tendría mucho sentido para ellos sacar el Presco mientras estén los del Gobierno autonómico activos”, considera Caballero.
Por ello, el tesorero de la FUCC lamenta que ambas administraciones no llegasen a un entendimiento político “para lanzar una campaña comercial coordinada”. El Gobierno local, sin embargo, dista de esta opinión y sostiene que no tiene por qué influir el hecho de que la Xunta haya impulsado una campaña propia.
La FUCC y Ayuntamiento se encuentran en negociaciones para el regreso de la primera a la Mesa de Movilidad. Fue el 14 de abril cuando la entidad decidió abandonar la mesa debido a la “falta de consideración” de las propuestas que habían lanzado semanas antes y que se centraban, sobre todo, en la búsqueda de alternativas para el transporte a la hora de humanizar una calle.
