Esto huele mal

El Deportivo no está para bromas. Se puede soñar y apuntar irónicamente que los futbolistas son como los libros infantiles, un puro cuento. O como los músicos, que vienen, tocan y se van. Pero no se preocupen que también los hay optimistas y dicen que son como los autobuses, que pierdes uno pero que acabará llegando el otro. El fútbol es fútbol diría el iluminado Vujadin Boskov. El mismo que cada siete días te da opciones de revancha.
Lo del partido frente al Sevilla nos dejó otra victoria moral. Y van… Ya empezamos a estar cansados de escuchar que lo seguimos haciendo bien, pero que falta fortuna. Jugamos como siempre y perdemos como siempre. No se pueden dar tantas facilidades a un rival que, a las primeras de cambio, te la acaba enchufando. Se ha puesto nuevamente en evidencia la fragilidad defensiva del cuadro que dirige un Víctor Fernández que vuelve, otra vez más, y van… a estar cuestionado. Es lo que tienen las derrotas. Las culpas, para no perder la costumbre, siempre caen del lado más débil.
El pinchazo frente a los andaluces no ha caído en saco roto. Marcar tres goles en tu campo, donde por fin anotó Oriol, y que acabes perdiendo, es para mosquearse, es que algo huele mal. No se están haciendo bien las cosas, aunque nos empeñemos en recordar que desde que comenzó el año todo ha ido a mejor.
Tampoco podemos vivir de recuerdos y seguir pensando, un servidor también ha caído en ese error varias ocasiones, que aquella victoria indiscutible ante el Valencia en Riazor, el rival de esta noche en Mestalla, nos pueden permitir ver el futuro con cierto optimismo y que existe plantilla para enderezar el rumbo en una Liga en la que se han perdido 47 de los 72 puntos en juego, 24 de ellos en Riazor y los 23 restantes como visitante. Hay jugadores que han “desaparecido” y otros que, sin embargo, han recuperado su mejor momento. Pero no es suficiente. Se necesita más porque no siempre los resultados de los rivales que también se están jugando la permanencia te van a favorecer.
El panorama liguero para el Depor se presenta muy oscuro. No hay que olvidar que tiene por delante siete salidas y que en casa recibirá al Espanyol, Córdoba, Atlético, Villarreal y Levante. Enfrentamientos vitales para asegurar la permanencia. Y si suena la flauta en las visitas a Valencia (hoy), Getafe, San Sebastián, Málaga, Elche, Bilbao y Barcelona, ya sería la leche.