Es la hora del Deportivo

Ya estamos otra vez metidos en el lío de la Liga. Y una vez más, nuestro Deportivo se dispone a afrontar una temporada llena de incógnitas, todas ellas motivadas por las habituales dudas que salen a la palestra cada vez que los blanquiazules se disponen a disputar un curso liguero en unas circunstancias que, como las actuales, siembran sus lógicas sospechas sobre el futuro del cuadro coruñés.
Atrás queda, a pesar del ascenso, el pobre juego exhibido por el equipo que dirigió Fernando Vázquez, dicho sea de paso, despedido de forma sorprendente y fulminante sin aparente justificación por el nuevo mandatario del club, Tino Fernández, al que no le ha temblado la mano a la hora de tomar esa determinación, que, por sus formas, me ha parecido pobre e injusta. El “presi” también ha sorprendido en su nueva elección. Cuando muchos colegas y aficionados teníamos en mente otros aspirantes, salió de la chistera el nombre de Víctor Fernández. La presencia del técnico aragonés en el banquillo del Deportivo ha producido disparidad de opiniones. De entrada, su pasado céltico ha provocado mucho recelo, pero esa corriente se ha ido diluyendo con el paso del tiempo.
Igual que una plantilla a la que era urgente innovar. Y así ha sido, aunque todavía quedan en nómina jugadores cuya continuidad, dada su escasa aportación y calidad técnica, no acabo de comprender. Si para actuar en la Liga Adelante no eran válidos, no sé qué se puede esperar de ellos en una competición liguera que exige un nuevo rumbo en el juego deportivista. Mañana, en Granada, tendremos la primera referencia de lo que puede dar de sí este equipo y las ideas del nuevo entrenador. Lo ocurrido en la pretemporada no anima a ser optimistas. Hubo más negativo que positivo. En el equipo se apreciaron muchos de los problemas del anterior ejercicio. Intensidad, agresividad, carencia de gol, escasa presencia en el área rival y un jugador  determinante en el área rival. Y ya sabe, si no hay goles, no hay paraíso. Sin embargo, siempre digo que este tipo de “pachangas” no son nunca valorables. Lo bueno, lo divertido, lo importante, comienza ya. Llega la hora de la verdad para las nuevas ilusiones blanquiazules, Canella, Cuenca, Lucas, José Rodríguez, Cavaleiro, Fariña... que junto a los que continúan en el club, tienen por delante la siempre complicada tarea de hacer de este Deportivo un equipo digno y referente en la mejor liga del continente europeo. Esta afición se lo merece.