Perplejos, oiga

La Justicia, según sus máximos representantes en España, es una señora desnuda que te invita a “conocerla”. Ya muchos pensábamos que la ley  está en pelotas y que da vueltas, rueda, según “el que más chuta”.
Leemos que “el Gobierno busca el fuero total para el rey. El Ejecutivo planea conceder a don Juan Carlos una protección jurídica que incluye su vida privada”.
Y luego te enteras de que la justicia rechazó, en 2012, dos demandas de paternidad contra el Monarca, por hechos supuestamente ocurrido cuando todavía no reinaba, acogiéndose a que la figura del rey, según establece la Constitución, no está sujeta a “responsabilidad”.
Y mientras esto pasa por aquí, ante la incredulidad de tirios y troyano, va Europa y dice que se escapan por los desagües miles de millones en la prostitución y las drogas ¿legales? Rápidamente te informan de que dentro de la trama Pokémon las investigaciones policiales se basan como prueba con la aparición de decenas de tarjetas de la ORA de A Coruña en el burdel Queen’s, que se traduce en “reinas” (¿lo pillan?) y que en dicho lugar de esparcimiento se reunían parte de los implicados en las tramas de corrupción que originaron Pokémon, Carioca y Campeón.
Tal vez por eso ya hicieron las cuentas en Hacienda: la prostitución recauda dieciocho mil millones de euros que, al 30% por la vía de impuestos, Montoro se llevaba seis mil.
Y esto de las cuentas tiene otra broma que firma el máximo organismo que se dedica a investigar las ídem, pues la prensa informa de que el Tribunal de Cuentas contrató la firma que reformó casas a dos de sus altos cargos y que entre los pequeños y medianos cargos hay familiares de los “altos” como para hacer un equipo de fútbol.
Y hablando de cargos: la Audiencia confirma el procesamiento del delegado de la Xunta en Ourense, acusado de desviar fondos europeos. Recordarán que este caballero goza de la confianza del “presi” Feijóo y el apoyo de la cúpula del PP…
¿Hablamos de corrupción? ¿De la marca España? ¿De cómo nos ven por ahí fuera, desde los Pirineos hasta Berlín, pasando por Bruselas?
Pues ya lo dice el jefe de la Policía: se mantienen abiertos casi un centenar de casos de corrupción política que afectan a más de un millar de personas.
Pero tranquilos: nos salvarán los ingresos de la prostitución y las drogas.
Quedamos perplejos.

Perplejos, oiga

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