NICOLÁS: AGENTE 008

Yse cierra la saga. Tenemos, por un lado, a Bond, James Bond, agente 007 al servicio de Su Majestad; al 009 –ya saben, Feij00, como fue bautizado en la campaña que lo ponía “al servicio de Galicia”¿?– y nuestro querido Nicolás, el pequeño gran hombre, superagente 008.
Vale, lo explico: Bond, según las pelis, era el chico más listo del Servicio de Inteligencia Británico y valía para un roto y un descosido y nuestro 008 tiene el teléfono del viejo Rey, va a la celebración del nuevo y corta el mar, que no vuela, en un velero por Marbella en compañía de Ignacio González (¿sigue en el trullo?), mientras el 009 navegó por las procelosas aguas que nos rodean en compañías que siguen en la jaula.
¿Está claro? Iba a dejar esto ahí, como posible borrador de Fulanito, el brazo jili del centro español de espionaje, cuando dos cosas me llamaron, primero la atención y luego a la indignación.
Una: el intrtépido periodista Eduardo Inda aseguró que en el CIS trabajan espias (abueletes, dijo) de 60 y 80 años… ¡y a mí en RTVE me prejubilan con 58! Dos: el pequeño, gran, Nicolás, en su periplo hacia Ribadeo vino a Ribadumia… donde pasa sus vacaciones ¿lo digo? otro de los laurerados atletas (ver fotos) que prestigian a esta tierra de vinos y mariscos: Mariano, primero el registrador y presidente de todos ustedes y nosotros.
Con estos dos datos se cierra la conexión, el círculo, la “cosa” y me da igual que desmienta la Casa Real o que la Vicepresidenta del gobierno (con minúsculas) diga, según contó Broncano en la SER, que ella y el pequeño Nicolás nunca fueron novios.
Ahora lo entiendo todo. He visto la luz: Nicolás es –después de pasar por el laboratorio del Centro ese de Inteligencia Militar  (una incongruencia, que diría Groucho) la niña de Rajoy, prima, pues, del primo científico que abjuró del cambio climático, pero se emocionó con el cambio de gobierno y, por tanto, apadrinado por la FAES, recompensado por Bárcenas, escoltado por la Policía de Madrid y amadrinado por Esperanza Aguirre
Nicolás, el Superagente 008, a pesar de estar cabreado por el IVA que su mentor le puso a los chuches, indignado por el recorte de las  becas, hizo su último servicio: arreglar en Cataluña el follón este del 9-N.
Ya saben como acabó: igualito que si lo hubiera hecho Rajoy en persona.

NICOLÁS: AGENTE 008

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