GURTEL Y OTROS CALADEROS

Hace seis años (2009, febrero) que estalló el caso Gürtel, conocido también como el caso PP, puesto que los informes policiales, la investigación judicial, señalan cómo Correa y sus ayudantes –con la necesaria colaboración de políticos– montaron un chiringuito para la corrupción en Génova, las comunidades y los ayuntamientos.
Desde Galicia hasta Baleares pasando por Castilla-La Mancha, Castilla y León, Valencia, Baleares, etc. Sobrecostos en obras y sobres en negro; donativos y receptores (algunos ya confesos) con más de setenta cargos del Partido Popular imputados y con graves acusaciones a sus más altos dirigentes (puros, dinero, trajes, bolsos, relojes, viajes, ertc.) que aún están bajo vigilancia y los testimonios ya admitidos –papeles, sms– que conforman sin duda el proceso por corrupción más grave de nuestra historia y que en un lustro ofrece como resumen dos políticos condenados, un juez apartado y miles de folios a la espera de un final que se dilata en el tiempo por los recursos, dilaciones en algunos recovecos de la administración y la escasa diligencia del partido que apoya al gobierno.
Tenemos, también, otros caladeros que convierten a nuestra política en una poza: Andalucía por los ERE y el caso UGT; Cataluña con los diferentes líos en que se ve inmerso el partido gobernante y, ahora, lo que los periódicos llaman “el mayor caso de corrupción en Galicia”. Sí, señores, sí. El asunto Pokémon que ya dio estos titulares: “Los pinchazos implican al segundo de Negreira en enchufes y amaños. Al mes de tomar posesión, Flores enchufó a varias personas en Vendex”. “El edil socialista José Nogueira, ahora en la oposición, quería colocar a su hermana en el Ágora, pero era imposible pues había lista de personas para enchufar remitidas por el PP”. Añadan que “directivos de Aquagest alentaron en Santiago la guerra interna en el PP”, y que “Vendex entregó un sobre con dinero la víspera de ganar una contrata en Ourense, ciudad gobernada por el PSOE” y que el socialista Orozco, alcalde de Lugo, también figura en el caso…
Es, palabra, como una novela negra. El sumario de la Pokémon toca de lleno a PSOE y PP en A Coruña y cita conversaciones con otros personajes de la vida política: un embajador, el cura, también ¡Dios! e incluso  se cuenta que Orozco le confiesa a uno de los representante de la empresa que “Rajoy está acojonado… y que no le extraña”.
Dios, qué tropelías. Joé, que tropa.