Detenido el presidente

Bueno, perdonen,  es una pequeña trampa. Se trata del expresidente y ¡ay! fue en Francia. Mis compañeros en la sauna no picaron cuando se lo conté, al igual que a ustedes dejando al margen lo de “ex” y lo de Francia, pero ninguno perdió la oportunidad, y empezaron los chistes; Te imaginas, dijo uno, que contestara como Mariano: todo esto es falso, salvo algunos cosas.
Tras las carcajadas otro añadió: Le podía haber dicho lo de Bárcenas “la libreta no es mía y la letra tampoco es mia”.
Ya metidos en harina volvió el primero con “si lo pillaron ahora, que ya no es y solo ‘ex’, fue una detención en diferido”.
Parece ser, dice la prensa, que el asunto es por haber pagado la campaña electoral con dinero “negro”, no como aquí, que el dinero negro se emplea solo para obras y amores, un ejemplo las de Génova o el edificio “pepero” en Castilla y León.
Y es que en Francia aseguran que el ex, cuando aún no lo era, mintió y eso no se perdone a un señor que tiene todo el poder, el BOE, la caja –aquí en “A” y en “B”– manda sobre los polis, los inspectores de Hacienda y cuenta con todas las bendiciones, pues la mentira no cotiza. Ahí tenéis la mentirijilla de otro personaje que juraba haber sido agraciado, varias veces, por el gordo de la lotería o la señora esa (¿las infantas son, de casadas, también señoras, o no?) que no se acordaba de los cursos de salsa o que pagaba en negro al personal de servicio pues no tenían papeles.
¿Gente desmemoriada? Baltar, sin ir más lejos que a Ourense: juró que los porteros y bedeles para la Diputación eran personal imprescindible y de urgencia y que no sabía que las contrataciones se hacían, en la adminsitración, por concurso.
Son, qué coño, pequeños detalles. Ya Fraga rotulaba en las listas de aspirantes a puestos pagados con dinero público si eran afectos o tenían el defecto de votar a otros partidos.
Allí, los detienen y aquí tenemos, por lo menos, que pararlos. Y es que han cerrado, otra vez cientos de camas y reducido el número de sanitarios. Según el propio Gobierno, durante su paso por el poder se han destruido cuatrocientos mil empleos públicos: policías, profesores, médicos etc.
O los paramos o quedamos detenidos en la miseria.