Otoño cultural

La cultura como encrucijada de encuentro. Nuestro Ayuntamiento tiende puentes de plata para conquistar nuestro beneplácito. Teatro, exposiciones, música, danza y cine. Ensimismado hay un faro de Hércules sobre la mar nocturna donde rielan ruborosas estrellas. El otoño asoma sobre hojas de árboles que mecen ocres sensaciones. Luminosa realidad que conforma artes plásticas, literatura, páginas musicales y fuerza de las palabras lanzadas desde un escenario. 
El teatro construyendo su “verdad” auténtica tan arrebatadora como la vida misma. Invocamos el centenario de Buero Vallejo, un autor equiparable a Lope de Vega o el mismo Shakespeare. Hombre de carácter templado, pero irascible si alguien le tocaba las narices. O amenazaba su colección de pipas compañeras de sus momentos a la intemperie. Textos para reflexionar. 
Desde una escalera hacia la gloria, con las cartas boca abajo, la fundación carcelaria o la censura de dobles historias. La tragedia de la esperanza. Vida doméstica en zapatillas y bata. Comprensión respecto a los antagonistas cuando él había sido condenado a muerte por los vencedores…
El Ágora, plaza pública proyectada a todos los vecinos con múltiples actividades, mientras los centro cívicos son oasis repartidos por todos los barrios. También el Fórum Metropolitano que, aparte talleres, trabajos, cine, certámenes y encuentros brindará, ciclo sin numerar, cinco representaciones a precios asequibles.
Después, caracol que se envuelve en su concha bombonera, el ciclo de danza ofrecido en el teatro Rosalía de Castro. Hermosura, silencio de cenobio, luminosidad, caja de música excepcional, el ciclo principal que abarcará toda la temporada escénica. Entre otros el plato exquisito de Cervantes con variado menú: el humor, la poesía, el ritmo desenfrenado y la música en directo.
La Coruña mantiene su desafío cultural.

Otoño cultural

Te puede interesar