Corre, Patxi, corre... y no paró de correr


FORREST Gump se puso a correr y cruzó Estados Unidos varias veces. “Corre, Forrest, corre”, le gritaban sus fans y él seguía adelante sin parar, hasta que un día le dio la ventolera, se detuvo y volvió a casa. A Patxi López le ocurre algo parecido, quiere ser secretario general del PSOE, le ha dado por devorar metros y ya se ha metido entre pecho y espalda más de 14.000 kilómetros. Tanto patear pa’ná, porque jefe de los socialistas no va a salir, pero tampoco Moussambani iba a ganar las Olimpiadas y allí nadó el tío en la piscina como un tritón.

Corre, Patxi, corre... y no paró de correr

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