Los estudiantes gallegos claman en la calle contra el decreto del “3+2”

Estudiantes y profesores, que se encuentran en huelga, así como sindicatos y partidos de la oposición, expresaron en las principales ciudades gallegas su rechazo a la propuesta de reforma universitaria propuesta por el Gobierno central por considerar que perjudicará a las familias con menos recursos que no podrán pagar los estudios a sus hijos.
Las manifestaciones, convocadas por los comités de estudiantes de las universidades gallegas, y respaldadas por sindicatos de profesores y trabajadores universitarios, se inscriben en la movilización que se celebra en el Estado contra la propuesta del Gobierno de flexibilizar la duración de las carreras, el famoso decreto del “3+2”.
Estudiantes, sindicatos y partidos políticos de oposición denunciaron e que la reforma del Gobierno fomenta la privatización del sistema universitario, perjudicando a las familias con menor poder adquisitivo.
Una portavoz de los comités de huelga de los universitarios, Uxía Romero, señaló que “todas las facultades” de la Universidad de Santiago “están cerradas”.
Romero indicó que ese sistema que se quiere imponer “favorece” a las familias con suficiente poder adquisitivo para, una vez concluidos los estudios universitarios de grados, “pagar dos años de máster”, y preguntó: “¿Qué hacen las demás?”.
El portavoz parlamentario de educación del PSdeG, Vicente Docasar, indicó que la reforma del Gobierno “puede impedir en el futuro el acceso a la Universidad de las capas medias y humildes de la sociedad” y expresó su esperanza de que el nuevo conselleiro de Educación, Román Rodríguez, “cumpla su palabra” de no actuar contra los intereses de esos centros académicos.
Rodríguez es una persona dialogante”, comentó Docasar, y señaló que “está obligado a atender estas reivindicaciones de la comunidad educativa gallega”.
Destacó que, a diferencia de otros países europeos como Francia, donde “las tasas universitarias de un máster son de 250 euros el curso”, el elevado precio de esa formación en España “pone en peligro el acceso a la Universidad y la equidad del sistema” de educación superior.
Para el portavoz nacional del BNG, Xavier Vence, la reforma constituye un “desmantelamiento” del sistema de educación superior, una “involución” y un “retroceso” de los servicios públicos que lleva a una “sociedad desigual”.
El líder del BNG consideró que hay “poco que confiar” en el nuevo conselleiro de Educación, porque “se pliega a los dictados del Gobierno central”.
Vence, que es profesor de la Universidad de Santiago, afirmó que “cinco años de formación universitaria son imprescindibles para una buena calidad” de los titulados, independientemente de si es “tres más dos, cuatro más uno o cinco. Cualquiera de las fórmulas sería válida”.
Lo que no vale es hacer grados finalistas de tres años porque implica una calidad de formación ínfima”, destacó el responsable nacional del Bloque.