Denzel Washington, el segundo actor afroamericano en conseguir un Oscar tras Sidney Poitier y uno de los intérpretes más respetados de Hollywood, cumplió ayer 60 años. Ha trabajado en más de cuarenta películas desde su debut en 1977, y ha tenido el privilegio de estar a las órdenes de los mejores directores de las últimas décadas como Robert Zemeckis, Tony Scott o Spike Lee. Sin embargo, Washington reconoció en octubre que, a su edad, ya no le resultan fáciles las escenas de acción.