Confirman la pena de 24 años de cárcel por matar a su novia de 131 puñaladas en Nerja

Confirman la pena de 24 años de cárcel por matar a su novia de 131 puñaladas en Nerja
Familiares de la víctima, tras enterarse de su muerte ep

La Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) confirmó la pena de 24 años de prisión impuesta por la Audiencia malagueña a un hombre que mató, en 2014, a su compañera sentimental, directora del Museo de Nerja, en Málaga, asestándole 131 puñaladas y que fue condenado por un delito de asesinato con la agravante de parentesco, con alevosía y ensañamiento, y otro de malos tratos habituales.
La Sala confirma íntegramente la sentencia dictada tras el veredicto del jurado y desestima el recurso presentado por el condenado, en el que solicitaba que no se apreciara ni ensañamiento ni alevosía.
La defensa argumentaba que “si bien el número de puñaladas infligidas a la víctima (131) y la magnitud de las heridas por la misma denotan la existencia de saña en sentido vulgar, no concurre la circunstancia de ensañamiento en su sentido jurídico por cuanto el acusado no tenía intención de causar un ‘lujo de males’, sino que su intención era exclusivamente la de matar a la víctima”.
La sentencia señala, según informaron desde el TSJA, que la descripción de las heridas y las manifestaciones de los forenses sobre el modo en que debieron producirse son “muy claramente demostrativas de que el agresor no se limitó a procurar la muerte, sino que se solazó en una agresión minuciosa y prolongada que, por su mecánica y resultados denotan sin duda alguna la intención deliberada de hacer sufrir a la víctima”.
Además, insiste en que “aunque es cierto que la existencia de una reiteración compulsiva de puñaladas de carácter letal no necesariamente equivalen a ensañamiento, en principio sí ha de presumirse la intención de hacer sufrir cuando los hechos son tan elocuentes como en el presente caso, en el que se producen 131 puñaladas repartidas durante varias zonas del cuerpo (algunas de ellas no vitales) y que pudieron prolongarse aproximadamente durante 20 minutos según los forenses”.
“No es, pues, que el acusado quisiera ‘rematar’ a la víctima y asegurar el resultado de muerte, ni siquiera que obrase de manera compulsiva en una sucesión instantánea de puñaladas, sino que tuvo a disposición el cuerpo de la víctima, aún con vida, durante un tiempo prolongado en el que a modo de escarmiento o explosión de agresividad, le infligió algo parecido a una tortura antes de obtener el resultado de muerte”, dice la sentencia.

Confirman la pena de 24 años de cárcel por matar a su novia de 131 puñaladas en Nerja

Te puede interesar