Un doble atentado en el aeropuerto de Estambul deja al menos diez muertos

Un doble atentado en el aeropuerto de Estambul deja al menos diez muertos
Los servicios sanitarios turcos trasladan a las víctimas en los alrededores del aeropuerto atacado reuters

Al menos diez personas murieron y otras 60 resultaron heridas por el doble atentado registrado ayer en el aeropuerto Ataturk de Estambul, el principal aeródromo de la ciudad turca, según un primer balance ofrecido al cierre de esta edición por parte del ministro de Justicia turco, Bekir Bozdag.
Las autoridades atribuyeron el ataque a dos terroristas suicidas que se inmolaron en la zona del control de seguridad, pero antes de pasar dicho control. El ministro, citado por NTV, explicó que uno de ellos abrió fuego con un fusil kalashnikov antes de detonar los explosivos.
Los medios de comunicación locales difundieron imágenes en las que se aprecian los graves daños sufridos en las instalaciones.
Según varios testigos consultados por cadenas de televisión, los taxistas colaboraron con las ambulancias en la evacuación de los heridos.
El acceso al aeropuerto quedó bloqueado y también se anunciaron desvíos y cancelaciones en los vuelos.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, convocó un gabinete de crisis para analizar lo ocurrido. El segundo aeropuerto de Estambul, el de Sabiha Gokcen, ya fue atacado en diciembre de 2015, en un atentado en el que perdió la vida una mujer del personal de mantenimiento y que se atribuyó el grupo armado Halcones de la Libertad del Kurdistán (TAK).
Estambul también ha sido escenario este año de varios atentados, entre ellos dos cometidos por terroristas suicidas en varias zonas turísticas y de los que las autoridades culparon al grupo yihadista Estado Islámico. En Ankara han tenido lugar dos ataques con coche bomba que se atribuyeron milicianos kurdos.
Por otro lado, al menos cinco personas, incluidas dos oficiales de Policía, resultaron heridas ayer por la explosión de una bomba al paso de un vehículo policial blindado en la provincia de Diyarbakir, en el sureste de Turquía, según fuentes de seguridad. La explosión se produjo cerca de un hospital estatal en el distrito de Dicle, al norte de la ciudad de Diyarbakir.
Los atentados con bomba contra las fuerzas de seguridad han aumentado después de que el alto el fuego con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) quedara roto en julio de 2015.
Mientras, Turquía ajustó sus protocolos militares para permitir que los aliados de la OTAN lleven a cabo más patrullas aéreas en su frontera norte con Siria.

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