La oposición afea que la Ley de Economía Social no propugne “una alternativa”

El Parlamento gallego aprobó ayer, en la primera jornada de la sesión plenaria, la nueva Ley de Economía Social de Galicia y lo hizo solo con el voto favorable del Partido Popular. Los cuatro grupos de la oposición han optado por oponerse al texto con el argumento de que no propugna “un modelo económico alternativo” y de que “da barra libre” para comerciar con los servicios sociales.
En su intervención ante el pleno de la Cámara, la diputada popular Maite Cancelo destacó que esta norma va en línea con “los países más avanzados” al dar “un trato diferenciado” a la economía social; al tiempo que ha resaltado que “contribuye a la visibilidad” del sector a través de un marco propio.
Frente a ello, la socialistas María Quintas echó en falta “fondos” y “nuevas medidas para la financiación de las empresas”, pues solo observa “meros principios programáticos que no dan soluciones reales”. “Solo hay enunciados sin contenido”, resumió la diputada del PSdeG, convencida de que la ley “no da respuesta a los problemas económicos y de empleo” que padece Galicia.
Con todo, situó como principal escollo para un voto favorable de los socialistas el hecho de que la ley “da barra libre” a la comercialización con los servicios sociales. “Es nuestra línea roja”, advirtió, desde la convicción de que lo relativo a estas prestaciones debe tener “más exigencias que otro tipo de instalaciones”, y que eso no supone “carga burocrática” sino “garantías”.
Por su parte, la diputada del BNG Carme Adán reparó en que la normativa “no modifica realmente el marco para un modelo económico alternativo” y en que tampoco supone un apoyo al cooperativismo. En paralelo, expresó su “escepticismo” sobre que el Consello de Economía Social “vaya a funcionar” entre críticas –compartidas por toda la oposición– a su falta de presupuesto y al hecho de que los sindicatos no estén representados.

“modelo liberal salvaje”
Asimismo, Eva Solla (AGE) puso en duda que esta ley “pueda cambiar en algo la tónica general de la economía” y lograr “un reparto de la riqueza” que se aleje “del modelo liberal salvaje” en vigor. 
De ahí el voto negativo de su grupo, dada la importancia de “democratizar la economía” en el actual escenario de “paro, precariedad y pobreza”; mientras ha cuestionado “el frenesí legislador” de los populares.
Finalmente, Consuelo Martínez, del Grupo Mixto, justificó su voto en contra a esta norma, que tildó de “panfleto del PP”, en que “no responde a las expectativas”. Además, coincidió con el PSdeG en que tiene “muy mala intención”, pues su objetivo es “poner los servicios sociales en el libre mercado” para convertirlos en “el gran negocio”.