Las nevadas que cayeron en las zonas altas de las provincias de Lugo y Ourense en la mañana dificultaron la circulación en varias carreteras, aunque ninguna vía de la red principal fue cortada al tráfico, según la Dirección General de Tráfico (DGT).
La más afectada es la Autovía de las Rías Baixas (A-52), donde la nieve complicó la circulación en el punto kilométrico 113 a la altura del municipio ourensano de A Gudiña. Con todo, el tráfico no fue cortado.
En Pedrafita do Cebreiro (Lugo), la nieve acumulada dificulta el tráfico en la práctica totalidad de las vías secundarias de esta zona de la montaña lucense.
Según fuentes de la DGT, la carretera LU-633 a su paso por la localidad de Pedrafita es la vía que suele centrar los problemas en las jornadas de nevada, aunque pese a la nieve que se concentra en los laterales, el tráfico no fue cortado.
Así las cosas, pese a que el tráfico de vehículos pesados fue prohibido en las zonas donde se produjeron nevadas, la red principal no se vio afectada de forma importante. Asimismo, la DGT recomienda circular con precaución también por la Autovía del Cantábrico (A-8) a la altura de Mondoñedo (Lugo) por la presencia de niebla.
Dispositivo en Lugo
La Diputación de Lugo activó desde la mañana de ayer un dispositivo especial en la Montaña lucense para combatir los efectos del temporal de nieve en las carreteras.
De este modo, el operativo, que en los últimos días empleó unas 56 toneladas de fundentes debido a las nevadas caídas y las heladas que se produjeron, actúa en carreteras de los municipios de O Caurel, Cervantes, A Fonsagrada, O Incio, Navia de Suarna, Nogueira de Muñiz, As Nogais, Pedrafita, Quiroga, Ribeira de Piquín, Samos y Triacastela. l