Laureano Oubiña: “No pienso morir en España aunque me quede un día de vida”

Laureano Oubiña: “No pienso morir en España aunque me quede un día de vida”
El narcotraficante cambadés, Laureano Oubiña, en la entrevista concedida a la cadena telecinco

El narcotraficante cambadés Laureano Oubiña Piñeiro considera que el sistema español le “discrimina” y no le concede el tercer grado “por ser quien soy”, llegando a declarar: “No pienso morir en España aunque me quede un día de vida”. En su haber tiene más de dos décadas de largos periodos en la cárcel –once de manera ininterrumpida– por tres condenas de tráfico de hachís y una de blanqueo de capitales, la que cumple actualmente. A su historial también se suma una huida de la justicia española.
El cambadés concedió en exclusiva una entrevista al programa de Ana Rosa Quintana de Telecinco que fue emitida ayer y en la que el narcotraficante pidió “perdón a quien haya podido hacer daño con el tráfico” de drogas y también por el tabaco porque “a alguien perjudicas, dejas de pagar a Hacienda”.

sin entrar en detalles
Algo más delgado que en sus anteriores apariciones públicas y sin la característica barba frondosa que le acompañaba desde hace años, respondió a diversas preguntas dirigidas a conocer su estado anímico y su situación penitenciaria, pero sin entrar en detalles de su pasado delictivo. Sí dijo Oubiña que si volviera a nacer cambiaría “muchas cosas” y una de ellas sería “haberme metido en ningún tráfico de hachís”, aunque también puntualizó que “nací en una época dura”.
En marzo cumplirá 71 años y lleva más de un tercio de su existencia entrando y saliendo de prisión pero, para “él lo más duro”, por encima de la vida entre rejas, es la “discriminación total” que asegura padecer por parte el sistema.
Oubiña relató que el tercer grado “me correspondería como mínimo el 12 de mayo de 2016, pero no se me concede ni a la mitad por ser quien soy, simplemente por llamarme Laureano Oubiña Piñeiro”. Declaró el reo que a otros presos de “relevancia política” con condenas de similar duración “se lo dieron por el simple hecho de tener 70 años”, aunque no negó en ningún momento su culpabilidad: “Voy a cumplir mi condena hasta el último minuto”, pero “veo que mis derechos no existen”.

enfermedad
Su malestar llega al punto de manifestar que “no pienso morir en España, aunque me quede un día de vida”. Una situación que ya se plantea por las graves enfermedades que asegura padecer y de las que se trata, como un cáncer de colon y la presencia de un tumor cancerígeno en un riñón. De hecho, afirmó que su “único sueño”, que es curarse, “es imposible” y solo quiere “alargar los días que me queden, lo más que la ciencia lo permita”.
Actualmente le quedan unos dos años entre rejas por blanqueo de dinero de la droga y cuando salga espera pasar su tiempo con su familia, a la que ahora ve cuando va a Madrid –aunque llega a decir que “tengo nietos que ni conozco”– y también con su actual pareja, de origen italiano.

historial
La primera vez que el cambadés fue condenado corría el año 1999 –antes tuvo un proceso sin consecuencias judiciales por contrabando de tabaco–. Fue por tráfico de hachís y le siguieron otras dos que zanjó en 2012, recobrando la libertad, pero por poco tiempo. Un año después se ratificó su última condena –por blanqueo– y volvió a la vida de reo. En estos años ha recorrido varios centros penitenciarios “haciendo rutas turísticas por toda España”, se quejaba en la entrevista emitida ayer. Pocos permisos ha tenido también en estos años. De hecho, en 2011 tuvo el primero en una década.En su contra jugó la fuga protagonizada años antes –fue interceptado en Grecia por la Interpol–.

Laureano Oubiña: “No pienso morir en España aunque me quede un día de vida”

Te puede interesar