Los diputados del BNG abandonan el Parlamento tras la expulsión de Carme Adán y denunciarán el caso

Los diputados del BNG abandonaron ayer el hemiciclo durante la celebración del pleno del Parlamento en solidaridad con su compañera Carme Adán, expulsada por la presidenta de la Cámara, Pilar Rojo, tras llamarla al orden en tres ocasiones.
Tras este abandono de los siete diputados del grupo parlamentario, su portavoz, Francisco Jorquera, anunció ayer que esta formación acudirá al Tribunal Constitucional (TC) para denunciar lo que consideran una “vulneración flagrante de derechos de la diputada, por parte de la presidenta del Parlamento.
El origen de este enfrentamiento se remonta a lo que el BNG entiende como una vulneración del pacto alcanzado a comienzos de la legislatura por todos los grupos para el reparto de iniciativas.
En virtud de aquel acuerdo, además, los grupos renunciaban a intervenir en las interpelaciones cuando no fueran el grupo interpelante, es decir, el que pregunta al Gobierno.
Tras el abandono de dos diputadas de AGE y su paso al grupo mixto, a comienzos del actual periodo de sesiones se modificó por parte de la Mesa, compuesta por PP y PSdeG, el reparto de iniciativas para dar cabida al nuevo grupo.
El BNG, que perdió número de iniciativas, ya advirtió en aquel momento de que estudiaría las acciones pertinentes por entender que se estaban vulnerando sus derechos, e incluso amenazaron con acudir al Tribunal Constitucional.
Hace dos plenos los diputados del BNG ya pidieron intervenir en las interpelaciones para fijar posición, pese al acuerdo inicial de legislatura, porque entendían que estaba roto por el nuevo acuerdo adoptado en la Mesa para el reparto de iniciativas.
De este modo, Carme Adán pidió participar por un tiempo de 10 minutos, como indica el reglamento, en la interpelación de AGE al conselleiro de Industria, Francisco Conde, sobre política industrial en Ferrol.
La presidenta le concedió tres minutos en función de sus atribuciones, dijo, según otro artículo del reglamento, y le indicó que tendría que hacerlo desde el escaño y no desde la tribuna de oradores, en alusión a otro acuerdo adoptado por los grupos al inicio de la legislatura para los turnos de réplica.
Tras dos llamadas al orden a Adán por hablar sin tener la palabra, la diputada se negó a intervenir desde el escaño e insistió en hacerlo desde la tribuna y durante diez minutos, motivo por el que fue expulsada y el resto de diputados del grupo abandonó el hemiciclo.