La oposición acusa al Gobierno de hacer “pellas” y no ganarse el sueldo

La oposición cargó ayer contra el Gobierno por su negativa a someterse a una sesión de control en el Congreso, acusó a los miembros del Ejecutivo de “hacer pellas” y “no ganarse el sueldo” y avisó de que con esta actitud los populares firmaron el “epitafio político” del presidente en funciones, Mariano Rajoy.
Esta catarata de críticas se produjo ante un banco azul vacío porque ningún integrante del Consejo de Ministros acudió a la sesión plenaria. Pese a que todos menos dos ministros son también diputados, ni siquiera se acercaron a la hora de la votación, que tuvo lugar justo antes de la reprimenda.
Para el socialista Antonio Hernando, los miembros del Gobierno “van a cobrar hoy por no trabajar” y evitar preguntas sobre los llamados papeles de “Panamá” que se han “llevado por delante” a un ministro, el incumplimiento del déficit o los planes de acogida de los refugiados.
A su juicio, “la imagen vacía del banco azul es triste pero refleja el Gobierno del PP, con un presidente que trata de huir de su pasado”. “La ausencia del gobierno es el epitafio político de una persona que se ha pasado la vida sin querer dar la cara, que ha comparecido a través del plasma y que ha salido del Senado por la puerta de atrás –resumió, en alusión a Mariano Rajoy–. Elijamos un presidente de un Gobierno que sea decente y que venga a dar la cara”.
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, acusó al Gobierno de “hacer pellas”. “Eso tiene un pase para los chavales de instituto pero no para el Gobierno”, remarcó, subrayando que el control parlamentario está previsto en la Constitución y exigiendo al Ejecutivo que respete las leyes. “Los poderosos no necesitan de las leyes porque tienen mucho dinero, a veces en Panamá, pero la gente normal sólo tiene las leyes”, añadió.
En representación de En Comú Podem, Lucía Martín denunció que “hay que tener muy poca vergüenza” para “negarse rendir cuentas”.
“El Gobierno no ha acudido a su puesto de trabajo. Menudo papelón”, proclamó el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, quien pronosticó que esta “etapa de decadencia política se va a acabar” porque España se merece “un gobierno que se gane el sueldo” y se va a “levantar”. “Vamos a tener un nuevo gobierno que respete a los españoles y dé la cara”, dijo el líder de la formación morada.
Desde el grupo mixto, Joan Baldoví, portavoz de Compromís, defendió que los diputados deben “ganarse el jornal” preguntando al Ejecutivo y los miembros del Gobierno por “dar la cara” por las decisiones que toman aún estando en funciones, y lamentó no poder preguntar al Gobierno por los papales de Pamaná o por el escaso número de refugiados que acogió nuestro país porque ha querido convertirse en el “Gobierno Wally que se esconde de los ciudadanos”.
Tras la catarata de reproches, el secretario general del grupo popular, José Antonio Bermúdez de Castro, se quejó de que “por primera vez en democracia se pretender obligar a un Gobierno en funciones a un control parlamentario ordinario más allá de los permitido por la ley”.
En su opinión, los partidos de la oposición se ponen de acuerdo en la “retahíla de descalificaciones” pero en cambio son incapaces de dialogar e intentar formar un gobierno alternativo.