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jueves | 25 abril | 2024
Martinsa-Fadesa ha puesto a la venta activos inmobiliarios repartidos entre A Coruña, Málaga, Zaragoza, Asturias y Madrid por un importe total de 6,8 millones de euros.
Como parte del proceso de liquidación de la inmobiliaria, los actuales administradores han sacado a la venta parcelas en Monte A Zapateira (Culleredo, A Coruña) en las que la inmobiliaria ostenta el 50% por 3,8 millones de euros.
El plazo para presentar las ofertas finaliza el próximo lunes 10 de agosto.
A comienzos de marzo, el juzgado gallego acordó la apertura de la fase de liquidación de Martinsa-Fadesa y de otras cinco entidades deudoras, tras la petición hecha por el consejo de administración, el pasado 2 de marzo, y ante el rechazo de las entidades financieras acreedoras para modificar los convenios concursales aprobados en marzo de 2011.
El 11 de marzo de 2011, el juzgado aprobó el plan de la inmobiliaria para pagar 7.200 millones de deuda en un plazo de hasta 10 años y levantar el concurso de acreedores, pero los incumplimientos y la falta de liquidez abocaron a la compañía a la liquidación, tras el rechazo de la banca acreedora a la última propuesta presentada por el presidente de la compañía, Fernando Martín.
Ante la posibilidad de incurrir en un nuevo impago, Martín presentó una modificación del convenio con el que buscaba quedarse con 883 millones en activos (frente a los 1.100 millones recogidos en la anterior propuesta) y con 489 millones de euros de pasivo (frente a los 507 millones anteriores), lo que arroja un déficit patrimonial de 394 millones de euros (desde los 593 millones iniciales).
Días antes de que el tribunal diese el visto bueno a la fase de liquidación de la compañía, la banca acreedora rechazaba modificar los citados convenios concursales.
Con ello, la banca optaba por dejar caer a la compañía –con 70 empleados– apelando a la responsabilidad que tienen con sus accionistas y evitando así un planteamiento que lo único que buscaba era que entregasen a Fadesa 6.000 millones de euros, apuntaban fuentes financieras.
Aseguraban que la propuesta presentada por Fernando Martín no tenía apoyos y no era ni creíble ni viable, y criticaron que entre las exigencias que planteaba estuviera mantener su sueldo millonario a pesar de las pérdidas que registraba la compañía y su falta de liquidez.
