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viernes | 19 abril | 2024
La salida gallega de la segunda recesión de la actual crisis "se produce de forma significativamente más débil que en el conjunto del Estado", según el informe de coyuntura del Foro Económico de Galicia.
El trabajo fue presentado por su coordinador, el economista y expresidente de la Xunta Fernando González Laxe, junto con sus autores José Francisco Armesto y Patricio Sánchez, así como el empresario Emilio Pérez Nieto.
En él se recoge la salida de la segunda recesión de la crisis a lo largo del año 2013, con cuatro trimestres consecutivos de crecimiento positivo, pero los recientes datos referidos a la UE "vienen a generar incertidumbre sobre la rapidez y solidez de esa salida".
González Laxe resaltó que Galicia sale de esta segunda recesión (la primera fue del 2009 a principios de 2010 y la segunda de finales de 2012 y 2013) de manera "muy divergente" con el conjunto de España, que "crece más rápido".
El especialista explicó el cambio de papel del consumo e inversión, que habían contribuido de forma negativa y ahora lo hacen positivamente, lo que calificó de "cambio cualitativo de muchísima importancia", pero el consumo de los hogares crece menos que la media española y la inversión está ahora "ralentizada o estancada".
La menor intensidad de la recuperación económica frente a España en el primer semestre del año se debe a la aportación de la demanda interna, especialmente el consumo privado, que crece en España un 2,4 % en el segundo trimestre y baja en Galicia un 1,4 %, y a la inversión, con una tasa de crecimiento española del 1,2 % y gallega del -1,8 %.
Según este análisis, el sector industrial, que sustentaba el crecimiento de la economía gallega en el 2013, se contrae en el primer semestre de 2014 y presenta tasas de variación interanuales negativas superiores al -2 % y es el de servicios el motor del crecimiento, mientras que la construcción presenta nuevamente los peores datos.
En cuanto al empleo, "ha mejorado un poco", según González Laxe, pero advirtió que, en términos de población activa, tiene tasas negativas, lo que "es un tanto preocupante de cara al futuro".
En conjunto, el economista señaló que "esas raíces vigorosas se ponen en entredicho", para resaltar la "debilidad" de la economía gallega, con fragilidad de los equilibrios reversibles y la posibilidad de una recaída, porque el crecimiento "se sustenta en algo no consistente".
Para el expresidente de la Xunta, "el futuro depende de si tenemos una visión estratégica con un modelo productivo bien definido".
Este tercer informe de coyuntura del Foro Económico de Galicia recoge también dos análisis, sobre el sector de la construcción y la pobreza y desigualdad.
En el primer caso, los autores resaltaron la caída en 5 años del valor añadido bruto del sector, que fue de un 6 % en Galicia y del empleo, con un -13 %, mientras que su peso en el PIB bajó del 13,7 % en 2007 al 8,7 % en 2013.
En este último año, la caída en Galicia fue del 5,8 %, mientras que en el conjunto del Estado, se redujo en un -3,3 %.
El esfuerzo que tiene que hacer una familia gallega para acceder a una vivienda es inferior a la media estatal, aunque este diferencial se está reduciendo en los últimos años. En 2013 un gallego debía destinar a este fin, para una vivienda de 100 metros, 6,1 años de salario, frente a la media de 6,6 años, cuando en 2009 eran 7,5 y 8,6 años, respectivamente.
En cuanto a la desigualdad, se mantiene estable en Galicia desde 2007, con una evolución similar a la española, aunque el comienzo de la crisis supuso para Galicia "el arranque de una clara y preocupante tendencia creciente" del riesgo de pobreza. Este indicador era del 14 % en 2008 y en 2012 subió al 16,45 %, con mayor incidencia en Pontevedra y menor en Lugo.
En la comparación autonómica, Galicia ocupa una situación intermedia, como en el caso del porcentaje que llega a final de mes, pero es la Comunidad en lo que se refiere a la percepción subjetiva de la pobreza.
Esta situación no tiene diferencias sensibles en cuanto a sexo, pero sí en lo que se refiere a la edad, de manera que la mayor bolsa de pobreza se registra en la franja más joven, de menos de 25 años.
También es superior en los extranjeros, que se eleva al 50 % y en las viviendas monoparentales o unipersonales, de manera que el retrato robot del pobre en Galicia es un joven extranjero que vive en una vivienda reducida.
Preguntado si son reales las previsiones de la Xunta de crecimiento del 1,2 % al final de este ejercicio, González Laxe respondió que solo en el caso de que las exportaciones "retomen" un crecimiento más vigoroso, sobre todo en sus bases, materias primas, agroalimentario y automóvil, y si ello se complementa con un mayor consumo, lo que viene dificultado porque las familias están "acogotados" por el nivel salarial.
Si estas circunstancias no se dan, para González Laxe "será complejo llegar a esa previsión" por la que se le preguntó.
De los presupuestos generales del Estado, advirtió de que es preciso atender al momento que atraviesa la eurozona, en la que "no están respondiendo" países como Francia o Alemania, que son los principales destinatarios de nuestros productos y recordó que el propio Banco de Estaña consideró que está justificada la tendencia que se recoge en las cuentas, "pero no las cifras del Gobierno".
Para la evolución de la economía, hizo hincapié en la necesidad de ser más competitivos en las exportaciones, aportar más valor añadido y acudir a más mercados y más especializados, aspectos en los que consideró que hay margen para mejorar.
Así, recordó el plan de internacionalización que proclama la Xunta, pero recordó que lleva años con ese discurso, pero sin concretar un conjunto de elementos para ello.
Sobre la subida salarial que ahora se baraja para ayudar al consumo interno, el coordinador del informe de coyuntura señaló la incidencia de este factor, tanto en los salarios como en las pensiones y dijo que tan importante es producir como consumir, pero centró en algunos sectores y empresas más dinámicas y desapalancadas las que pueden asumir la subida.
En este sentido se pronunció el empresario Emilio Pérez Nieto, quien dijo que la subida salarial no se puede llevar a cabo "indiscriminadamente", porque, "si no, volvemos a las andadas".
