El Banco de España instó ayer a la banca “a que adopte las medidas necesarias” para garantizar que, en cada operación de retirada de dinero de los cajeros, solo se procede al cobro de una comisión, ya sea por la entidad dueña de la tarjeta o por aquella que sea propietaria del cajero.
El Banco de España hizo esta consideración en un comunicado después de que Caixabank decidiera hace unos meses aplicar una comisión de dos euros a los no clientes por sacar dinero de sus cajeros, una operación que otras entidades como el BBVA o el Santander podrían poner en marcha después del verano.
“La retirada de efectivo en un cajero automático constituye un único servicio de pago, con independencia de que se realice en un cajero propiedad de la entidad emisora de la tarjeta bancaria, o de otra entidad”, según explicó el organismo.
En consecuencia, ese servicio solo puede originar el cobro de una comisión, ya sea por la entidad emisora de la tarjeta o por la entidad propietaria del cajero.
Para trasmitir este criterio, el Banco de España remitirá sendos escritos a la Asociación Española de Banca (AEB), la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA), la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc), la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito (Asnef) y la Asociación Española de Entidades de Pago (Anaed).
En esta comunicación, el Banco de España instará a las entidades financieras a que adopten las medidas que sean necesarias para garantizar que, en cada operación, se proceda al cobro de la comisión solo por parte de una de ellas.
Hace unos meses, Caixabank empezó a cobrar una comisión de dos euros en los cajeros para los no clientes, una estrategia a la que se han sumado en los últimos días el BBVA y el Santander, mientras que otras entidades como el Banco Sabadell han dicho que lo estudiarán.
Por su parte, la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) celebró que finalmente el Banco de España se haya pronunciado respecto a las comisiones. Adicae manifestó su satisfacción, aunque criticó que el Banco de España haya “obviado cualquier tipo de sanción a las entidades implicadas y tampoco haya exigido la devolución a los consumidores de las cantidades que los cajeros de Caixabank han cobrado hasta ahora”.