Hubo ‘Ríos’ de felicidad

Hubo ‘Ríos’ de felicidad

Concluyó el Campeonato del Mundo de la clase Snipe, que a lo largo de esta semana ha organizado el Real Club Náutico de La Coruña. Y ha sido el triunfo de la regularidad, con el puertorriqueño Raúl Ríos acabando con el dominio brasileño de las últimas ediciones.
Y es que desde 2009 los regatistas del gigante suramericano siempre habían salido victoriosos. Ese año ganó Bruno Bethlem, en 2011 lo hizo Alexandre Tinoco, en 2013 de nuevo Bethlem y en 2015 Mateus Tavares.
España no pudo aprovechar el hecho de competir en casa. Sin embargo, los anfitriones y, en concreto, las Islas Canarias, pueden estar satisfechos con la segunda posición final de Gustavo del Castillo, la tercera de Rayco Tabares y la cuarta de Alfredo González. Para ganar, algo que no sucede desde que Félix Gancedo se impuso de manera consecutiva en 1973 y 1975, habrá que seguir esperando.

El inicio
La jornada comenzó a las 14.07 horas con viento del Norte en torno a quince nudos. El protagonismo español ya empezó con la victoria de Damián Borrás, acabando segundo Alexandre Tinoco. En la lucha por el título, Raúl Ríos notaba cómo Gustavo del Castillo se aproximaba a solo tres puntos. El antillano era undécimo y el canario séptimo.
Y poco antes de las 16.00 horas, empezó la última regata de la competición. Rayco Tabares mostró su calidad y terminó de la mejor manera, con un primero (ya había logrado un tercero en la manga anterior), que le aseguraba pisar el podio final. Segundo fue Alfredo González, que también completaba un gran campeonato. Y tercero, el brasileño Alexandre Paradeda.
Por su parte, Raúl Ríos aseguraba el Mundial gracias a la sexta posición en este parcial, con Del Castillo octavo.
Con respecto a los coruñeses Marcos Míguez y José Ramón Pardo, concluyeron en la vigésimo octava posición, y con la satisfacción de haber ganado una regata en la fase clasificatoria
Este Campeonato del Mundo de la Clase Snipe concluyó con la entrega de trofeos y la cena de gala.
Así, se pone el punto y finala  dos semanas muy intensas en el Náutico coruñés, primero con el Mundial de categoría juvenil y después con este open/senior. l

Hubo ‘Ríos’ de felicidad

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